Árbol natural o artificial, ¿Cuál es mejor para esta Navidad?
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de octubre de 2017.- Para el fundador de Grupo Carso y uno de los hombres más ricos del mundo, Carlos Slim, la reacción del gobierno federal posterior a los sismos del 7 y el 19 de septiembre pasados, ha sido buena, pero no así la de los liderazgos políticos.
“¿Ya me estás metiendo a la política o qué?”, le respondió al reportero que le planteó la pregunta. “La verdad yo he visto ausencia de líderes de partidos políticos, y mucha presencia del gobierno”, respondió, de manera escueta, a la pregunta sobre el papel de los líderes de los partidos políticos.
Cauteloso, evitó ahondar sobre si habrá un impacto electoral por ello. En conferencia de prensa para hablar sobre la recolecta de donativos de la Fundación que lleva su nombre y que serán destinados a afectados por los terremotos del 7 y 19 de septiembre, el empresario habló sobre distintos tópicos, de las necesidades de las zonas afectadas por los sismos, pero evadió hablar de política. No quiso pronunciarse sobre las negociaciones del Tratado de Libre Comercio, aunque sí expresó que “ningún país puede vivir sin comercio externo”, frase que tiene un significado especial si se toma en cuenta quién la pronunció.
Se le preguntó sobre la independencia de Cataluña, y no quiso opinar, ya que se trataba de “otro sismo”, asentó. Con eso bastaba.
Lo que sí mostró Slim, quien estuvo acompañado en la conferencia por su yerno Arturo Elías Ayub, fue estar al tanto de diversas cifras y explicaciones sobre el sismo, e incluso se permitió dar algunas sugerencias.
Consideró que la reconstrucción de zonas afectadas puede convertirse en una oportunidad de dar un impulso a economías locales. “Eso sería nuestro sueño, que pudiera también hacer esta actividad que se desarrollara una actividad económica localmente, que se quedara encarrerada para poder seguir creciendo”.
Dio datos que lo mostraron como un hombre informado. Aseguró que 21 mil 600 viviendas son las que están afectadas y abarcan los estados de Oaxaca, Chiapas, México, Puebla y de la Ciudad de México. En cuanto a daños a recintos culturales dio la alarmante cifra de mil 600, entre museos, monumentos o zonas arqueológicas, aunque aclaró que menos del 20 por ciento tienen daños estructurales y que algunas habrán de ser protegidas.
En infraestructura de salud 154 construcciones sufrieron daños pero sólo 13 tienen daños estructurales.
En la Ciudad de México clarificó datos de inmuebles afectados: 10 mil catalogados como verdes, que sólo tienen daños menores, y requerirán de yeso, pintura o la sustitución de plafones; mil amarillos, que hay que revisar y que desarrolladores inmobiliarios se comprometen a restaurar, y los clasificados como rojos suman 500, son los que hay que demoler o reestructurar.
Slim hablaba como enterado de todo lo relacionado al sismo: señaló que en la reconstrucción de casas en zonas rurales deben hacerse sin chimeneas contaminantes; hizo cálculos de cuánto podría costar una reconstrucción con base en el costo del metro cuadrado; se refirió a las zonas sísmicas incluidas en el recientemente presentado Atlas de Riesgos, remarcó que la alerta sísmica no sirve cuando los sismos vienen de distancias tan cortas como ocurrió con el que tuvo de epicentro Puebla el 19 de septiembre, e incluso dio una explicación económica, claro que sí, sobre la disminución de la inflación registrada en septiembre y presumida por el gobierno y la atribuyó a que posterior al sismo del 19 se dieron servicios gratis de telefonía y wifi y se permitió el libre paso por los segundos pisos.
“Vamos bien, lo único que son proyectos y soluciones que no son de un día para otro”, dijo sobre los esfuerzos del gobierno y la sociedad para la reconstrucción.
Una reportera le preguntó qué opinaba sobre la eventual llegada de empresarios a la política incluido él, y si ve un momento para que lo hagan.
Slim fue claro en su respuesta. “Los empresarios que quieran ser políticos que les gusta la política son más políticos que empresarios. Los empresarios son una cosa y los políticos otra, es la vocación, si tienes vocación empresarial o política, si tu tío es empresario tu hermano o papa quiere ser político eso ya es otra cosa”, fue su respuesta.