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CIUDAD DE MÉXICO, 5 de diciembre de 2017.- La Agrupación de Comerciantes de la Zona Rosa (Acozoro) urgieron al gobierno de la Ciudad de México a demoler el edificio de Génova 33, ya que a más de dos meses del terremoto del 19 de septiembre, aún no ha sido demolido, lo que genera pérdidas económicas a los comerciantes y molestias a los vecinos.
El presidente de la Acozoro, Jorge Pascual, calculó que tanto por los 40 negocios afectados por Génova 33 como por las obras de remodelación de la Zona Rosa, que ya van para un año, se han generado pérdidas de 100 millones de pesos.
Asimismo, advirtió que mientras no se demuela el edificio de 10 pisos, la calle donde transitan unas 70 mil personas al día es un riesgo en caso de presentarse otro sismo.
Pidió al jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera que acuda, sobre todo luego de declarar que para el sábado 9 los negocios ya abrirán.
“Es muy importante que venga, está mal informado al decir que el sábado van a abrir los negocios de Génova, es imposible”.
Reprochó que pese a la promesa de que Génova 33 sería una prioridad en las demoliciones -fue uno de los primeros edificios en ser anunciada su demolición- aún sigue en pie.
“Se nos prometió que iba a ser prioridad Génova 33, afecta a vecinos y a comerciantes”, expresó.
También pidió acelerar la atención al edificio de Hamburgo 112, el cual está afectado e impide el funcionamiento parcial de Plaza la Rosa que tiene 25 negocios cerrados por ello.