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CIUDAD DE MÉXICO, 12 de diciembre de 2017.- Los datos de prueba presentados por la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina permitieron que un Juez de Control vinculara a proceso a un hombre de 45 años de edad, relacionado con la muerte de otro de 58 años, con quien mantenía rencillas, al parecer, por asuntos de trabajo, informó, en conferencia con medios, la fiscal Desconcentrada de Investigación en Tláhuac, Gabriela Salas García.
En la sala de prensa de la PGJ, se añadió en un comunicado, la funcionaria relató que el pasado 8 de diciembre, vecinos de San Rafael Atlixco, colonia Ampliación José López Portillo, delegación Tláhuac, solicitaron apoyo a elementos de la policía preventiva, luego de escuchar que el ahora occiso discutía con el inculpado, ambos de oficio albañiles.
Al llegar al lugar de los hechos, dijo, los servidores públicos hallaron al imputado en cuclillas, sosteniendo un cúter con mango de color anaranjado, a un costado de la víctima que se desangraba, y que minutos más tarde perdió la vida a consecuencia de las heridas provocadas por el arma punzo-cortante.
El agente del Ministerio Público de la Fiscalía Desconcentrada de Investigación en Tláhuac, inició una carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado y dio intervención a la Policía de Investigación (PDI) y al personal de la Coordinación General de Servicios Periciales para la elaboración de los dictámenes correspondientes.
Entre las diligencias ministeriales realizadas, indicó Salas García, están las entrevistas a testigos quienes manifestaron que anteriormente el imputado amenazó de muerte al agraviado ya que, supuestamente lo había dejado en mal con el patrón de ambos.
Se realizó la inspección del lugar de los hechos y del cúter asegurado al imputado, se obtuvieron el protocolo de necropsia y los dictámenes en criminalística y fotografía que fueron integrados a la carpeta de investigación para su judicialización.
En la audiencia inicial el juzgador calificó como legal la detención, lo vinculó a proceso y le fijó prisión preventiva oficiosa.
De ser declarado culpable, el imputado podría alcanzar una penalidad de hasta 50 años en prisión.