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CIUDAD DE MÉXICO, 19 de enero de 2018.- El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, anunció que el próximo simulacro de sismo en la Ciudad de México será diferente y tendrá protocolos nuevos.
“Porque hemos aprendido, porque hemos agregado tareas, porque hemos tomado nota de lo que se tiene que hacer y cómo se tiene que hacer, así que nuestro próximo simulacro 2018 será un simulacro distinto. Un simulacro que vendrá acompañado de tareas adicionales”, adelantó, a cuatro meses del terremoto del 19 de septiembre pasado.
Delineó que uno de los protocolos que se modificará será el sobrevuelo de helicópteros, que deberán elevarse a una mayor altura para evitar que causen un colapso, en caso de sismo.
“Simplemente lo que vamos a agregar con los helicópteros; la Ciudad de México tiene que emitir lineamientos para que en caso de un sismo con la fuerza o magnitud que ahí se determine, los helicópteros no puedan hacer sobrevuelos a determinada altitud.
“Independientemente del protocolo de verificación, tenemos que hacer una restricción en el sobrevuelo de los helicópteros porque son un factor, un factor que puede complicar labores de rescate o que puede acelerar, pues colapsos de edificios”, explicó.
Mancera ordenó a la Agencia de Gestión Urbana (AGU) acelerar el retiro de cascajo en Iztapalapa, luego de hacerlo en Xochimilco.
A la Secretaría de Obras (Sibse) y al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) les ordenó recuperar instalaciones de drenaje como de agua en Tláhuac.
También dio indicaciones para que las secretarías de Gobierno, Desarrollo Social (Sedeso) y el Sacmex en coordinación con la Asamblea Legislativa presenten un informe del rescate de la zona Chinampera de Xochimilco y de intervención en las grietas Tláhuac.
Asimismo, respecto a los afectados del multifamiliar de Tlalpan, el mandatario capitalino indicó que las secretarias de Gobierno, de Obras, de Desarrollo Social, y el Sistema de Aguas procedan a la conclusión de los trabajos en los edificios catalogados como verdes y dar todo el apoyo necesario para la reestructuración de los edificios amarillos.