Suman 5 heridos por camión de pasajeros en camellón de juegos infantiles
CIUDAD DE MÉXICO, 20 de enero de 2018.- En la esquina de 14 de Febrero 8, en El Ocotal, en la Magdalena Contreras, se ve una escalera metálica que da al cielo; luce solitaria, sin pared al lado o piso arriba.
Es parte de lo que queda en pie del domicilio de la pareja formada por José Máximo Pérez Romero y Susana Mendoza y sus dos hijos.
Se trata de lo que era una construcción de tres pisos, que solo conserva uno, algunos castillos desnudos que sostenían los otros dos, como consecuencia del terremoto del 19 de septiembre pasado, y los escombros aún no son retirados, lo que se ha vuelto un motivo de conflicto con los vecinos. De un lado una señora pidió retirar una especie de cúpula, porque tenía miedo que de caerse dañara su caso. Por otro, otra vecina pidió retirar los escombros de la calle para el paso d una pipa, como si fuera tan fácil, dice Mendoza a Quadratín.
Frente a la edificación de ladrillos rojos, en el numero 4, hay otra que aparentemente solo sufrió daños en una pared exterior, hasta que su dueña, Carolina Aguirre permite el acceso a su patio, donde al fondo se ve un mini precipicio que da a una barranca. Solo unos tres metros lo separan de sus habitaciones.
A causa del terremoto la tierra se desgajó, por lo que la familia debió comenzar a rellenar con tierra reunida de escombros y cascajo y llantas esa área para formar una pared y sostener la casa.
Uno de los hijos de la señora Aguirre describe que dicha pared ya lleva alrededor de 700 llantas rellenas y compactadas con material llevado por unos 12 camiones de cascajo y escombros.
De ambos domicilios se escuchan quejas por la falta de atención para demoler o para saber el daño real de su construcción.
Susana Mendoza afirma que ha acudido decenas de veces a la delegación para pedir ayuda pero solo consiguió que desde el 25 de diciembre les enviaran trabajadores para demolerla. Desde ahí les dijeron que no habría recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para reconstruir su casa, en la que llevaban un año viviendo, la que aun no concluían y para la que debieron vender algunos predios de los que ella y su marido eran dueños.
«Debimos vender muchas cosas para tener la casa, nos quedamos sin casa ni predios y luego del sismo nos tuvimos que ir con mi mamá y rentamos un cuarto para las cosas», comparte con Quadratín.
La señora Aguirre por su parte recuerda que se quedó a la espera del dictamen estructural de su casa, y muestra lo que asevera es el único documento que tiene al respecto: una petición técnica para determinar el grado de riesgo en que se encuentra su predio. La petición fue recibida el 12 de octubre del 2017 y enviada al subdirector de Atención a emergencias y riesgos de la Magdalena Contreras.
Ambos vecinos se quejaron ante medios de comunicación de lo que acusaron falta de atención delegacional, cuando se enteraron que el jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera y el jefe delegacional de Magdalena Contreras, Fernando Mercado Guaida, entregarían en la zona unas casas reconstruidas.
INGRATITUD
A la calle 14 de Febrero ya no llegó Mancera, pero sí Mercado Guaida, quien fue cuestionado por Quadratín al respecto y afirmó que a todos los afectados se les ha apoyado.
«Quien lo diga que lo compruebe, qué ingratitud, la delegación ha pagado a cualquier persona que se le haya dañado su casa total o parcialmente», dijo.
Reconoció que la casa del número 8 no recibiría apoyo del Fonden pero recalcó que la delegación le ha ayudado a sus dueños a demolerla.
«Platicaré con ellos pero este edificio se demolió por nosotros. No sé quién permitió el uso de suelo porque aquí la construcción es de dos pisos y ahí es de tres pisos, debió demolerse hace mucho tiempo y ahí está, era un riesgo para todos los vecinos. Era un uso de suelo mixto 2, son las afectaciones del sismo, que digan que no hubo apoyo, entonces, ¿quién demolió el inmueble?
En cuanto al apoyo del Fonden, indicó que no lo recibirían porque es para gente de escasos recursos.
«Si puedes construir tres pisos no tienes pobreza extrema, son las reglas de operación», señaló, aunque aclaró que podrían acceder a un crédito de los tramitados por el gobierno capitalino ante la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) -que son de hasta dos millones de pesos- o de hasta 125 mil pesos por parte de la delegación.
En cuanto al caso del numero 4 de 14 de Febrero, ahí la delegación no puede hacer nada, ya que está al lado de una barranca.
«Una zona donde está prohibido construir y no fue mi administración la que autorizó construir ahí», aseguró.
A 4 meses del terremoto, reconoció que ha habido tardanza en la atención pero destacó avances, como 80 casas que sufrieron daños parciales, que ya fueron reparadas.
Informó que la demarcación recibió 614 reportes de daños, de los cuales 94 fueron menores, como tener una grieta en la pared y fueron canalizados al gobierno de la ciudad; 314 de dichos reportes son amarillos, daños parciales, de los cuales 80 corresponden a las atendidas y 206 son rojas, es decir daño total, las cuales podrían ser apoyadas por el Fonden, pero deben seguir las reglas.
«No queremos duplicar apoyos».
El gobierno capitalino informó por su parte que para las 80 viviendas hubo una inversión conjunta con la Magdalena Contreras de 65 millones de pesos, además que 18 casas se encuentran en proceso de reconstrucción.
Asimismo, que ambas administraciones colaboran en la demolición de 37 inmuebles desde la contingencia.