Suma Operación Enjambre 7 capturas de 14 contra funcionarios de Edomex
CIUDAD DE MÉXICO., 9 de mayo de 2018.- El asesor y miembro del cuerpo diplomático de la Embajada de Irak en México, Germán Cruz Gómez, denunció el estado de indefensión en el cual se encuentra él y su familia por parte de instituciones bancarias, luego de que la identidad y datos personales de su esposa fueron usurpados por terceros.
Mediante una carta enviada a la Redacción de Quadratín, el miembro del cuerpo diplomático explicó la manera en como una institución bancaria presuntamente entregó una tarjeta de crédito a un desconocido utilizando datos personales de su esposa, además del acoso que sufre por parte de supuestos despachos de cobranza que le reclaman el pago de una deuda.
A continuación el texto integro:
El día 12 de marzo del 2018 mi esposa Lucero y yo Germán fuimos a un establecimiento donde ella pago con su tarjeta oro internacional de crédito de Bancomer y le dijeron que marcaba error, le dio la tarjeta Platinum y también no permitió la operación porque volvía a marcar error, fuimos a la sucursal Coruña en Tlalpan delegación Benito Juárez, al querer disponer de dinero en el cajero también marcaba un error para ambos plásticos y la leyenda decía al final que fuera con un ejecutivo del banco.
Acto seguido, acudimos con el Ejecutivo de Bancomer y al estar con él le comentamos lo sucedido inmediatamente revisó en su sistema y en la pantalla no decía que tuviera algún problema las dos tarjetas de crédito, por lo cual dijo que llamaría al Centro de Atención Bancomer para saber que estaba pasando ya que a él no detectaba nada.
Al llamar por teléfono contestó otro ejecutivo a quien le explico el problema y solicitó que esperáramos unos minutos, el representante del banco que atendió la llamada respondió que efectivamente ambas tarjetas de la Sra. Lucero estaban bloqueadas porque durante dos mensualidades no se había hecho ningún pago del crédito en la tarjeta oro.
De inmediato mi esposa respondió, porque estaba en el altavoz, que era imposible que su tarjeta estuviera bloqueada ya que esta estaba pagada, y le dio el respectivo número, a lo cual el ejecutivo respondió: «no señora, es otra tarjeta oro internacional».
Al darnos el número nos dimos cuenta que nunca tuvo en posesión ni se le entregó esa tarjeta a mi esposa, y que desconocía la existencia de una tercera tarjeta la cual jamás contrato.
Al enseñarnos los documentos el ejecutivo de la sucursal, nos dimos cuenta que no eran ni las firmas ni las letras de mi esposa Lucero, además que el día 20,21 y 22 de diciembre del año 2017 a las 17:06:35 de la tarde –lo cual es ilógico ya que a esa hora el banco está cerrado– dispusieron de la cantidad de casi 45 mil pesos en la sucursal de Municipio libre colonia Portales, a la cual jamás hemos asistido.
Al indagar nos informaron que tarjeta se contrató el día 27 de mayo del 2016, y supuestamente se tiene una hoja firmada de acuse de recibo de la tarjeta y el número del NIP por parte de mi esposa. Sin embargó, al verificar la firma resulta que no es su firma ni su caligrafía, quien realizó esta contratación fue un ejecutivo de la sucursal de Municipio Libre no. 85, Portales, al cual no conocemos de nombre Roberto Carlos Rojas Valdes, cabe mencionar que en esas fechas mi suegra estaba hospitalizada en estado crítico ya que la habían desahuciado por una enfermedad terminal, por lo cual resultaría ilógico ya que mi esposa tenía que cuidar las 24 horas en el hospital a mi suegra.
Cobraron 2 años de anualidad de la tarjeta, comisiones, impuestos, etc., además que transcurrido casi dos años, ocuparon la tarjeta el fin de año pasado, cobrando la anualidad.
Además de que BBVA Bancomer no me manda los estados de cuenta desde hace dos años, según para proteger la tala de árboles, pero en nada te protegen a ti, es claro que no existe la confidencialidad de los datos personales que tiene bajo su resguardo ya que con ellos hicieron un trámite, violando el artículo 16 de la Constitución, es evidente que no existe la protección de información sensible que esta a resguardo por el banco.
En este banco no es seguro que tengan los datos de nadie, es evidente que cualquier ejecutivo dispone de nuestros datos y para lograr sus metas de vender tarjetas, seguros de vida, de auto etc., que les exigen los gerentes y directivos de sucursal hacen este tipo de artimañas para beneficiar a un banco.
Además de que existe un fraude y un robo de identidad te exigen que pagues lo que terceros defraudan, es decir; que el mismo banco está de acuerdo con este tipo de situaciones sin importar como obtener clientes aun por medio de este tipo de prácticas continuas, por lo cual los bancos no son la mejor opción para tener nuestros datos seguros.
Lo más extraño es que recibí durante cerca de cuatro meses más de 220 llamadas diarias para pagar una tarjeta que jamás tuvimos en nuestro poder y que si le debes a este banco o a cualquier otro te amenazan, siendo esto un delito, llamándote de diferentes números que no existen, con la finalidad de protegerse y decir que es una mentira y por otra parte te están grabando diciendo “usted tomó la llamada” y lo hacen de forma ilegal.
El día que falleció mi madre también recibí de ellos así como a mis referencias al día cerca de 430 llamadas diarias a partir de las 06:50 horas hasta las 23 horas, ellos si quieren sus pagos inmediatos de sus fraudes pero para darte una respuesta te tardan más de 2 meses en resolverte.
No hay una justicia equitativa en esto y nadie que los regule verdaderamente ni la Comisión Nacional de Valores, por lo cual a cualquier usuario le pueden robar la identidad y ellos te exigen el pago.
Si no te están amenazando de visitas a tu domicilio que si las hacen y gente de muy mal aspecto amenazando que si no pagas mi familia iba a sufrir también las consecuencias.
Por si fuera poco, el día 9 de enero del año 2018 aproximadamente a las 10 de la noche, a Lucero Sotelo le robaron con violencia y arma de fuego una camioneta Mazda x3 modelo 2017, en la colonia Nativitas, en frente de su menor hija que también le acompañaba.
Al principio GNP no quería levantar el reporte del robo porque no le daba el número de póliza, a pesar de que jamás no lo entregó el banco ni la agencia de autos, quien nos tramitó el seguro nos aseveró que el banco tenía que responder solo utilizando mi nombre o placa.
Sin embargo al momento de la contingencia al recurrir a la aseguradora me dijeron que esto era insuficiente, y la persona que me respondió en el número para reportar el robo me dijo que no podía darme el servicio sino le daba el número de póliza colgándome el teléfono.
Lo más lamentable es que contratas un seguro demasiado caro para estas situaciones y el servicio es demasiado malo y poco eficiente, en ese instante fui hacer mi denuncia a BJ4 en Parque Delta, en donde el servicio deja mucho que desear por parte de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México porque aparte de que eres víctima, los mismos Ministerios Públicos te tratan muy mal.
Tras denunciar salí casi a las 4 de la madrugada, pero fue hasta el tercer día que alguien por fin de Grupo Nacional Provincial GNP, nos atendió amablemente y nos proporcionó el número de reporte de robo.
Después de esto acudimos al banco donde se obtuvo el crédito de auto en Scotiabank, y le dijimos a la gerente de nombre Rocío Mora, que queríamos cancelar el crédito por el mal servicio que nos habían ofrecido, ya que ni el banco durante esos tres días nos quiso dar el número de póliza ni ayudarnos a levantar el reporte de robo.
Asistimos a la sucursal de Coruña en Calzada de Tlalpan, y la gerente de la sucursal le dije que desde que nos entregaron la camioneta no había algún día que este banco no nos insultara y amenazara vía telefónica además de no darnos la ayuda debida para que la aseguradora se hiciera responsable, ya que jamás nos dieron talonario para ver los días de pago, y menos la póliza del seguro, y al no saber los días precisos de cuando se pagaba, un día me llamó alguien del banco a mi esposa diciéndole que era una ratera, vividora y defraudadora por no querer pagar, esto en septiembre del 2017.
Ante los insultos respondimos que nunca nos dieron el talonario de pago y fuimos a varias sucursales y nadie quiso auxiliarnos, así que pagamos en fechas que creíamos eran las correctas.
Al ver todo esto lleve mi carta de cancelación de crédito de auto y me la recibieron se puso el sello y firma de la cancelación en esta sucursal, ya que vía telefónica me dijeron que ese era el procedimiento.
Al día siguiente me llamó la gerente del Scotiabank Rocío Mora y me dijo que no se puede hacer la cancelación, a lo cual reviré que ya me habían aceptado la carta y ella dijo que eso no le importaba y que tenía que seguir pagando.
Fui a la Condusef y ellos mismos me respondieron que no podían hacer nada porque era un contrato de adhesión y tenía que hacer lo que ellos dijeran.
Al ver que ni la Condusef puede pelear por mis derechos de contratos amañados que las mismas autoridades han permitido que se usen en perjuicio de los usuarios seguí pagando, hice el trámite ante la aseguradora por pérdida total, después de entregarle toda la documentaron al banco para el pago del seguro 6 veces, perdieron la documentación de la valija del banco y simplemente la ejecutiva Sonia Ourostegui del área de seguros de Scotiabank me nos trató de manera déspota y prepotente.
Aseveró que a ella le “valía” que siguiera haciendo los pagos y cuando a ella “le pegara la gana resolvería”.
También intervino Daniel Mungía, ejecutivo de la misma área, con la intención de seguir alargando el tiempo y que siguiera pagando es decir cinco meses más de depósitos y hasta hoy día no me resuelven.
El pasado 3 de mayo de este año hablé para saber cuando iban a resolver y me dijeron que esa cuenta de crédito el banco la vendió a un despacho para su recuperación. Pregunté a que despacho de abogados respondiendo al de Grupo Ordaz, pedí una explicación de por qué hicieron eso y solo me dijo el señor Daniel que ese “ya no era su problema y que lo arreglara con ese despacho de abogados”.
En conclusión, contraté un seguro muy caro en Scotiabank de un auto que me robaron, pese a esto el banco no se hizo responsable ni la aseguradora GNP.
El banco nunca me entregó la póliza, seguí pagando sin tener y nunca me repusieron la camioneta, entonces para que me hacen pagar el seguro si al final quien se queda con el pago total del vehículo es el banco y uno perdió su dinero por que el banco no quiso pagar el deducible y por eso me dio tantas largas para que siguiera pagando a este banco para que ellos no desembolsarán ni un solo peso, además de perder las mensualidades como pago de intereses al banco.
Me pregunto cuánto es lo que roban y el engaño de pagar un seguro, porque si te roban el banco recibe la totalidad del pago y uno ya cubrió varias mensualidades dejándote sin un peso ya que eso se lo queda el banco de intereses, nunca entendí esta parte ya que si el seguro le paga la camioneta en su totalidad por pérdida total al banco es justo que regrese la parte proporcional de los meses ya que este recupero la totalidad del pago de la unidad.
Es claro que los bancos no están regulados de forma equitativa para los usuarios, los malos políticos permiten a estos bancos hacer operaciones fraudulentas bajo la protección y según un esquema legal que deja en total estado de indefensión a los usuarios.
Después del robo mi madre fallece motivo por el cual no pague ese mes ya que estaba de luto y trasladando a mi madre en su lugar de origen para enterrarla como fue su última voluntad, me hicieron más de 50 llamadas por parte de Scotiabank para insultarme y amenazarme que si no pagaba iba a tener consecuencias y que iba ir gente a mi casa por la buena o por la mala.
Al explicarles mi luto según ellos no les importaba, lo cual me hace ver bancos con falta de moral y ética, así que hicieron una andanada de llamadas recibiendo en mi número ese día que mi madre falleció más de 130 llamadas más cerca de 350 llamadas a mis referencias que puse en mi solicitud amenazándolas también como si ellos hubieran sido mis avales, lo cual bajo el esquema legal es una violación clara de nuestros derechos que al final ningún Presidente o candidato va hacer algo por proteger a los mexicanos.