Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
La danza de las pensiones
Si bien representa un paso fundamental en la lucha contra la corrupción y la desigualdad que existen en el país, la eliminación de las pensiones a ex presidentes es como quitarle un pelo a un gato. Algunos se deben de estar carcajeando.
No por algo Enrique Peña Nieto no vetó la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos cuya orden de publicación en ese caso fincada en la Constitución, recayó en el actual presidente del Senado Martí Batres. La riqueza de los ex presidentes con seis años de bachicha. comisiones, negocios y regalos suntuarios, son, se decía antes, para mantener a seis generaciones. Ahora el número de generaciones mantenidas debe de haber aumentado. De siempre veíamos en las llamadas páginas de sociales, a esas generaciones campantes, como una facción privilegiada con el dinero que su pariente ex funcionario había robado. La investigación de esas riquezas puede ser posible y en algunos casos revertidas. Si la prescripción ha hecho de las suyas o todas las maniobras que usaban y usan los regímenes para neutralizar a través de normas y apoyos de expertos -se habla ahora de Eduardo Medina Mora como oportuno enlace-, la exhibición pública y el descrédito pueden operar, aunque a algunos de ellos, cínicos, les valga.
PENSIONES DE ANCIANOS, ACADÉMICOS, POBRES Y BURÓCRATAS , A DISCUSIÓN
Con el cambio de gobierno, habrá cambios fundamentales también en las pensiones de los adultos mayores. Claudia Sheinbaum las manda al terreno federal con ánimo de incorporar cien mil ancianos más y eleva la cifra de apoyo a ese sector en 2 mil millones de pesos. La inquietud que surge entre quienes la reciben es si se mantendrá la cifra que se da, aunque uno de los argumentos de esa decisión es que se trata de borrar a los vivales que como siempre han aprovechado la situación para tener dos pensiones, la federal y la de la CDMX. Lo que más asusta y preocupa es la situación de las universidades públicas, diez de las cuales están en el peligro al que las orilló la mala administración pública y el saqueo de los gobiernos locales entre los que se encuentra el de Graco Ramírez ex gobernador de Morelos. La crisis que han generado las pensiones, salario del retiro justo y legítimo por un largo trabajo, no es culpa del añadido de personas cada año, ni el aumento del promedio de vida. Es simple y llanamente del mal manejo y el uso que se ha hecho de ellas. El ejemplo más reciente es la inversión de las Afores en al proyecto aeroportuario de Texcoco, sin pedir opinión a los ahorradores. La larga historia de la disposición de parte de los gobiernos de dineros cuya adjudicación ya era legal para los trabajadores y la puesta en riesgo de su seguridad futura, ha sido permanente. Elecciones, gastos suntuarios, déficit de la cuenta presupuestaria, fueron algunos de los eventos que dieron pie a esos gastos. De la misma manera que se utilizaban paraestatales u organismos descentralizados y fideicomisos como cajas chicas del sistema. Yo recuerdo eso de la Lotería Nacional por ejemplo, donde trabajé. Ahí, la institución era bolsa para pagos de columnistas y la nómina para funcionarios de otras dependencias que aparecían como aviadores con salarios añadidos. Las pensiones que en el caso actual del IMSS, por ejemplo, rebasan los 3 millones, están en otro conflicto.
LARGA HISTORIA EN UN SISTEMA ERRÁTICO
La existencia de las pensiones suele reseñarse en las crónicas laborales, desde fines de los años treinta del siglo pasado. Se pasa por los muchos cambios y leyes que tocan la materia, hasta llegar a esa farsa que son las Afores, en las que los propios trabajadores generan un ahorro que sirve más bien a las empresas y bancos que las controlan y que terminarán siendo exiguos recursos para su retiro. Las muchas propuestas de cambio a las pensiones quedan para que el nuevo gobierno decida qué hacer con ellas, en el entendido de que ante la lucha contra la corrupción, el aporte de los trabajadores pueda ser enfocado de diferente manera. Se usó la ley para explotarlos, ahora debe cambiar. De los tiempos que hemos visto diría José Hernández en su Martín Fierro (UNAM 1975):
En su ley está el de arriba
si hace lo que le aproveche;
de sus favores sospeche
hasta el mesmo que lo nombra:
siempre es dañosa la sombra
del árbol que tiene leche.