Claudia Espino, la propuesta de Taddei a la Secretaría Ejecutiva del INE
CIUDAD DE MÉXICO, 20 de noviembre de 2018.- Para que la ciudadanía recobre la confianza en las instituciones policiales y se garantice que quienes formen parte de ellas no se coludan con la delincuencia organizada, es indispensable que los elementos que no acrediten el control de confianza no puedan continuar prestando sus servicios ni en un área administrativa, en otra institución de seguridad pública o de protección civil.
En un comunicado se informó que al presentar una iniciativa para reformar el artículo 74 de la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el diputado federal Rubén Moreira, propuso, incluso, sancionar como una conducta delictiva a quienes en el ejercicio de sus atribuciones se abstengan de dar de baja a quienes no hayan aprobado el control de confianza.
Desde la tribuna de la Cámara de Diputados el legislador de Coahuila, propuso también agregar una fracción al artículo 139 de dicha ley que consiste en sancionar hasta con ocho años de cárcel a funcionarios que no den de baja o faciliten el ingreso de malos policías a otras corporaciones.
Tras subrayar que las instituciones policiales están diseñadas para servir y proteger a los ciudadanos, recordó que de acuerdo a la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2018, realizada por el INEGI, el 64.5 por ciento de la población de 18 años considera a la inseguridad como el mayor problema de su entidad, en tanto que más del 50 por ciento desconfía de la policía.
Rubén Moreira urgió a que el Centro Nacional de Certificación y Acreditación del Sistema Nacional de Seguridad cumpla con su función de verificar que los centros de evaluación y confianza de la Federación, Estados y Ciudad de México realicen sus funciones de conformidad con las normas técnicas y estándares mínimos en materia de evaluación.
Resaltó que dichas evaluaciones constituyen un instrumento para acreditar las cualidades que un servidor público debe reunir para el desempeño de la función policial, por lo que resultan indispensables para seleccionar a los elementos integrantes de las corporaciones de seguridad en los tres órdenes de gobierno.
“Hoy día no se cumple dicha disposición y elementos que no han acreditado las pruebas de evaluación y control de confianza siguen laborando en instituciones de policía, son cambiados de adscripción e incluso son contratados en instituciones diferentes a aquellas de las que fueron dadas de baja”, puntualizó.
De acuerdo con el secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, dijo, el 10 por ciento de los policías en activo, a nivel nacional, no son confiables, no obstante, se encuentran laborando en diferentes órdenes de gobierno.
Y recordó que en Coahuila se disminuyeron los homicidios en un 80 por ciento, y uno de los aspectos fundamentales fue blindar a los cuerpos de seguridad para que la delincuencia no se apoderara de ellos.