Regreso de Trump causa incertidumbre en el panorama económico
CIUDAD DE MÉXICO, 21 de enero de 2019.- Previo a su viaje a Panamá, durante la Misa celebrada este lunes en la Casa Santa Marta, el Papa Francisco afirmó que “vivir acusando a los demás, buscando defectos ajenos, no es cristiano”, no es “el estilo cristiano”.
En su homilía el Santo Padre contrapuso el estilo cristiano al estilo “no cristiano”, al que definió como un “estilo acusatorio”, un “estilo mundano” y un “estilo egoísta”, dijo, según detalla la Agencia Católica de Informaciones.
“El estilo acusatorio es el estilo de aquellos creyentes que siempre tratan de acusar a los demás, viven acusando”. “Siempre descalifican a los demás. Es un estilo de promotores de ausencia de justicia: siempre están intentando acusar a los demás. Pero no se dan cuenta de que es el estilo del diablo. En la Biblia al diablo se le llama ‘el gran acusador’, que siempre está acusando a los demás”.
El Papa aseguró que se trata de “una moda entre nosotros” que ya existía en el tiempo de Jesús. En este sentido, recordó las palabras del Señor cuando decía a los acusadores que “en vez de mirar la paja en los ojos de los demás, hay que mirar la viga en los propios”.
También cuando a la turba que iba a dilapidar a la mujer adúltera le dijo: “Quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra”.
Además, el Pontífice definió como “mundano” el estilo de vida propio de aquellos católicos “que recitan el Credo, pero viven de la vanidad, de la soberbia y del apego al dinero”.
“La mundanidad, la mundanidad arruina a mucha gente. Gente que es buena, pero que se deja llevar por este espíritu de la vanidad, de la soberbia, del hacerse notar. No hay humildad, y la humildad forma parte del estilo cristiano. Debemos aprenderla de Jesús, de la Virgen, de San José, que eran humildes”.
Otro defecto de la sociedad de hoy es “el espíritu egoísta”, “el espíritu de la indiferencia”. Ese espíritu “me lleva a creerme un buen católico, hago las cosas, pero no me preocupo de los demás, no me preocupo de las guerras, de las enfermedades, de la gente que sufre, de mi prójimo”.
“El estilo cristiano es el de las Bienaventuranzas: mansedumbre, humildad, paciencia en el sufrimiento, amor por la justicia, capacidad de soportar las persecuciones, no juzgar a los demás… Ese es el espíritu cristiano, el estilo cristiano”, defendió el Papa.
En este sentido, señaló que “si quieres saber cómo es el estilo cristiano, para no caer en ese estilo acusatorio, en el estilo mundano y en el estilo egoísta, lee las Bienaventuranzas. Ese es nuestro estilo, el de las Bienaventuranzas”.