
Informa México medidas para cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944
CIUDAD DE MÉXICO, 29 de enero de 2019.- La vicepresidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, la priista Dulce María Sauri Riancho, aseguró que en el PRI la adversidad los fortalece y ahora están en una etapa donde se reorganizan rumbo a la próxima Asamblea Nacional donde se elegirá al presidente nacional del partido.
«En el PRI la adversidad nos une, la prosperidad muchas veces nos divide (…). La unidad obedece a un instinto primario de sobrevivencia; la división es condenarnos a la extinción; como tenemos las y los priistas instinto de sobrevivencia, buscamos que los problemas personales o de grupo, no se antepongan al interés superior de llevar adelante a nuestro partido», enfatizó.
Entrevistada al término de la mesa de análisis de la minuta sobre la reforma al artículo 19 constitucional en materia de prisión preventiva oficiosa, Sauri Riancho recordó que será el próximo 19 de agosto cuando termine el período de la actual dirigencia que empezó en 2015 con Manlio Fabio Beltrones y finaliza con Claudia Ruiz Massieu.
A pregunta expresa sobre el llamado que hizo la ex gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega de que se emita la convocatoria para renovar la dirigencia y se consulte a las bases militantes, Sauri Riancho señaló que corresponderá al Consejo Político y la Comisión Política Permanente hacerlo de acuerdo a los tiempos que marcan los estatutos del partido, y podrán participar los que estén interesados.
«Se ha señalado reiteradamente por parte de la presidenta, del Secretario General, que el PRI está reorganizándose y que tenemos el compromiso de llevar adelante la Asamblea, porque tenemos que revisar también nuestros documentos básicos, y desde luego la elección de la nueva dirigencia nacional», sostuvo.
Sobre el posible cambio de nombre del partido debido al desprestigio que ha sufrido en los últimos años, y que fue una propuesta del propio ex presidente Enrique Peña Nieto, la priista dijo enfáticamente no estar de acuerdo, y señaló que en “muy última instancia” si se modifica el nombre pero no el contenido, no tendría ningún sentido.
Refirió que no solo se tienen que cambiar a quienes desprestigian al partido, muchos de ellos, dijo, se han ido drenando naturalmente hacia Morena, sino que el PRI reconstruya su espacio político en la sociedad mexicana.
«Mientras no cambie el contenido, llámese como se llame (el partido) vamos buscando cómo cambiar el contenido, me parece que es lo prioritario. Para mí lo fundamental es que el PRI reconstruya su espacio político en la sociedad mexicana, y eso exige una redefinición del partido, y eso se tiene que debatir en una Asamblea Nacional», puntualizó.