Reforma judicial deja sin protección a periodistas: Jan Albert Hootsen
CIUDAD DE MÉXICO, 31 de enero de 2019.- Luego de que Fitch Rating redujera la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex) y mantuviera la perspectiva negativa, autoridades de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) trabajan en el impacto debido a que la empresa productiva del Estado ha servido por años para financiar buena parte al Gobierno federal.
Alejandro Gaytán González, de la Unidad de Planeación Económica, señaló en conferencia de prensa que hay que trabajar en diferentes partes de la recaudación tributaria.
«Se está trabajando para ver cómo se puede revertir porque la solución del problema de las finanzas de Pemex debe ser de manera integral y reducir el riesgo», agregó en presentación del el Informe Trimestral sobre la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública del Cuarto Trimestre de 2018.
Autoridades de Hacienda, encabezadas por la subsecretaria de Egresos, Victoria Rodríguez Ceja; de la Unidad de Política de Ingresos Tributarios, Francisco Arias Vázquez; el coordinador de asesores del subsecretario, Marlon Aguirre George, y Alejandro Gaytán refirieron que la situación de la deuda de Pemex creció en los últimos años alcanzando niveles por arriba de los 100 mil millones de dólares, lo que genera una presión sobre las finanzas públicas.
Si bien la volatilidad puede tener un efecto, indicaron que se cuenta con las coberturas petroleras para hacer frente a los ingresos.
Por el lado de que la desaceleración global implique una reducción de crecimiento en Estados Unidos y que tenga un impacto sobre el PIB de México y a su vez sobre la recaudación tributaria, Hacienda dan un seguimiento constante sobre la situación.
Durante el cuarto trimestre de 2018, la economía global continuó expandiéndose. No obstante, la Secretaría de Hacienda subrayó que se acentuaron las señales de desaceleración en la actividad económica, lo que ha disminuido las perspectivas del ritmo de crecimiento global para 2019.
El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su actualización de enero del reporte de Perspectivas de la Economía Mundial, mantuvo el crecimiento mundial de 2018 en 3.7 por ciento, a pesar de un crecimiento más débil en Asia y Europa. En sus proyecciones para 2019 fueron revisadas a la baja de 3.7 a 3.5 por ciento.
Adicionalmente, el FMI destacó que el balance de riesgos para el crecimiento global se encuentra sesgado a la baja debido, principalmente, a que continúan las disputas comerciales entre Estados Unidos y China, la mayoría de las economías han alcanzado altos niveles de endeudamiento, y la posibilidad de que las condiciones financieras internacionales se tornen más restrictivas.
La actividad económica de México durante 2018 registró una expansión como resultado principalmente del crecimiento de los sectores primario y terciario, según el Informe de Hacienda.
Tomando en cuenta la estimación oportuna del Inegi, en el cuarto trimestre de 2018, el PIB registró un crecimiento anual de 1.8 por ciento. Al considerar el efecto estacional, el PIB se incrementó a una tasa trimestral de 0.3 por ciento.
Durante 2018 el PIB creció a una tasa anual promedio de 2.0 por ciento. A su interior, las actividades primarias y los servicios se incrementaron 2.4 y 2.8 por ciento, respectivamente, mientras que la producción industrial avanzó 0.2 por ciento.