El concierto del músico/Rodrigo Aridjis
Aprendemos también de él
Carlos Ravelo Galindo, afirma:
Y siguen contra las mañaneras del señor de Palacio Nacional. Quienes las critican, insisten que no dicen “nada”.
Ayer, una reportera de “Cuestión”, les puso la muestra a todos los “colegas” inconformes.
Puso en práctica sus conocimientos de reportera. Nada más.
Sin pedir la palabra hizo lo que nadie ha hecho en cien días. Cuestiono a al jefe del ejecutivo sobre un acto personal. Su presencia en una cena con el yerno del Werito. En dónde sucedió. En casa de quién y qué se trató.
El respondió afable. Ella insistió. Y recibió contestación. Por tercera ocasión lo interpeló, y el Presidente, afectuoso, concluyó su respuesta.
Ella, la colega mujer, sin irritar al primer mandatario recibió una cordial explicación
Por ello insistimos que aprendemos también de él.
Y luego de este instructivo paréntesis otra aseveración.
La inspiración del argentino Jorge Luis Borges no tuvo límites. De ella rescatamos prosa que evidencia su genio. Tomamos algunas frases que con humildad compartimos.
De tanto perder aprendí a ganar; de
tanto llorar se me dibujó la sonrisa que tengo.
Conozco tanto el piso que sólo
miro el cielo. Toqué tantas veces fondo que, cada vez que bajo, ya sé que
mañana subiré.
Me asombro tanto como es el ser
humano, que aprendí a ser yo mismo.
Tuve que sentir la soledad para aprender a
estar conmigo mismo y saber que soy buena compañía.
Intenté ayudar tantas veces a los
demás, que aprendí a que me pidieran ayuda.
Traté siempre que todo fuese
perfecto y comprendí que realmente todo es tan imperfecto como debe ser
(incluyéndome).
Hago sólo lo que debo, de la
mejor forma que puedo y los demás que hagan lo que quieran.
Vi tantos perros correr sin
sentido, que aprendí a ser tortuga y apreciar el recorrido.
Aprendí que en esta vida nada es
seguro, sólo la muerte… por eso disfruto el momento y lo que tengo.
Aprendí que nadie me pertenece, y
aprendí que estarán conmigo el tiempo que quieran y deban estar, y quien
realmente está interesado en mí me lo hará saber a cada momento y contra lo que
sea.
Que la verdadera amistad si
existe, pero no es fácil encontrarla.
Que quien te ama te lo demostrará siempre sin necesidad de que se lo pidas.
Que ser fiel no es una obligación sino un verdadero placer cuando el amor es el
dueño de ti.
Eso es vivir. … La vida es
bella con su ir y venir, con sus sabores y sinsabores…
Aprendí a vivir y disfrutar cada detalle,
aprendí de los errores pero no vivo pensando en ellos, pues siempre suelen ser
un recuerdo amargo que te impide seguir adelante, pues, hay errores
irremediables.
Las heridas fuertes nunca se
borran de tu corazón pero siempre hay alguien realmente a dispuesto a sanarlas
con la ayuda de Dios.
Caminar de la mano de Dios, todo
mejora siempre. Y no te esfuerces demasiado que las mejores cosas de la vida
suceden cuando menos te las esperas. No las busques, ellas te buscan.
Lo mejor está por venir”
Es justa frase para concluir este compendio de existencia y conocimiento.