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CIUDAD DE MÉXICO, 24 de abril de 2019.- En el marco del debate sobre la reforma constitucional en materia educativa en la Cámara de Diputados, el legislador Ricardo Gallardo adelantó que el grupo de diputados sin partido se sumará para votar a favor de la Reforma Educativa, ya que considera que este es el primer paso para la construcción de un sistema educativo acorde al nuevo siglo y a los nuevos retos que impone la evolución del mundo.
«A nombre de los diputados sin partido anuncio que vamos a votar a favor de esta iniciativa, pues creemos que va a favorecer al estado mexicano, que va a fortalecer a las familias y a las niñas y niños de este país.
«Hoy queda claro que podemos ser uno, cinco o nueve diputados, pero cuando se dedican a construir acuerdos parlamentarios hay verdaderos avances. Es una obligación del Estado darle mantenimiento a todas las escuelas, pues son cientos que no tienen luz, techo, piso ni limpieza necesaria”, detalló, Mauricio Toledo.
El integrante de la Comisión de Educación aseguró que la aprobación de la reforma también destacará la importancia de los consensos y las coincidencias políticas que tienen como único fin las metas y no las diferencias.
«Con la aprobación de la reforma constitucional en materia educativa no hay vencedores ni vencidos, pues lo que se busca es beneficiar a los estudiantes del país con las mejores condiciones laborales, materiales y académicas para el profesorado.
«En política las cosas tienen que salir por consenso. Hay debates fuertes, pero el objetivo de esta iniciativa es el beneficio de la gente y de la población, y creo que hoy el que gana no es el ex presidente o el presidente actual, sino que gana el pueblo de nuestro país”, destacó.
El diputado señaló que con la abrogación del texto constitucional, se podrá avanzar en aspectos relevantes, como los que se citan a continuación:
Finalmente, dijo, llegamos a esta que es la primera etapa de lo que podrá ser la Reforma Educativa que marque este sexenio. Pero no lo veamos como un acto solo de la administración en turno, sino como una oportunidad política para generar los consensos de partidos políticos, organizaciones educativas y académicas para diseñar los instrumentos legislativos que permitan abatir el rezago educativo que existe en el país.