Abanico/Ivette Estrada
Guerra sucia en el PRI: Cárdenas Moreno, favorito
El gobernador con licencia de Campeche y aspirante a dirigir el PRI a nivel nacional, Alejandro Cárdenas Moreno se va quedando sin contrincantes rumbo al día de las elecciones internas, que se realizarán en agosto.
Como todos sabemos, hace unas semanas José Narro renunció a la aspiración de ser líder nacional y a su militancia del PRI, al tiempo de que acusó simulación en el proceso de elección.
En un mensaje difundido en redes sociales, señaló que no quería formar parte de la simulación en el proceso de elección de la nueva dirigencia, al tiempo que admitía que «tal vez» pecó de ingenuidad al señalar que buscó «ayudar al cambio y a la transformación del PRI, pero los esfuerzos fueron infructuosos. Pensé que el partido había entendido el mensaje», reconoció.
Por otro lado, recientemente se dio a conocer que la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del PRI aprobó la cancelación de la candidatura de Lorena Piñón Rivera luego de que se comprobó que fue candidata a una diputación al Congreso de Veracruz por el PAN en el proceso electoral 2015-2016.
Pero no solo eso, también le fueron retirados sus derechos de militancia. Ante esta acción Piñón reaccionó con furia y aseguró que a la presidenta del tricolor, Claudia Ruiz Massieu “le tiembla la mano” para expulsar a los corruptos que han hecho mucho daño al partido y al país, a quienes calificó como “el cártel de los dinosaurios”.
Y finalmente está José Ramón Martell, quien solito se bajó de la contienda y decidió dar su apoyo a Alejandro Moreno Cárdenas, en aras dicen de la unidad.
Martell, quien se sumó a la campaña presidencial del abanderado priista, José Antonio Meade Kuribreña, destacó que comparte el proyecto de Moreno Cárdenas, dijo que ha llegado el momento de las definiciones.
Entonces Alito ya solo tiene dos contrincantes: Ivonne Ortega Pacheco y Ulises Ruiz Ortiz.
Pero a Ruiz Ortiz le negaron el registro como candidato bajo el argumento de que no cumplió con los requisitos solicitados, sin embargo, el exgobernador de Oaxaca manifestó que impugnará el proceso y que realizará una campaña alrededor de la República en la que denunciara la supuesta ‘farsa’ que se vivió en torno a la elección de candidatos.
Apenas ayer estuvo en San Luis Potosí en donde denunció que Enrique Peña Nieto está operando en favor de la campaña de Alejandro Moreno, para entregar el partido al presidente de la República Andrés Manuel López Obrador.
Denuncia que también realiza la exgobernadora yucateca Ivonne Ortega, hasta el momento la única contrincante de Alito en las próximas elecciones. También en SLP, pero en el municipio de Ciudad Valles, la exgobernadora yucateca aseguró no sólo el expresidente Peña Nieto tiene metidas las manos en el proceso interno que vive el tricolor sino también el actual mandatario López Obrador, ya que su mismo contrincante Alejandro Moreno supuestamente se lo expresó semanas atrás.
Y remató que de ganar Moreno Cárdenas la dirigencia del PRI, este partido se convertirá en satélite de Morena y estará en riesgo de desaparecer.
Una guerra interna y sucia es lo que al parecer se vive al interior del PRI.
En este contexto, vale la pena destacar la opinión del El líder histórico del sector campesino priista, Augusto Gómez Villanueva, quien alertó que debido a la “anarquía” que se ve en el partido, el proceso interno para la elección de la nueva dirigencia nacional del PRI podría encaminarse hacia la ruta de la “judicialización”.