Abanico
· El ataque cibernético ransomware paraliza las actividades de Pemex
· CNDH: el Senado cumple orden presidencial con presidenta ilegítima
· Por intolerante en seis meses morderá la mano de su amo: oposición
La información se mantiene en secreto.
El ataque cibernético a Petróleos Mexicanos (Pemex), inicialmente negado y luego identificado como ransomware ha tenido efectos más graves de los declarados.
Tal vez se detectó y “ya está siendo atendido”, como declaró el lunes el organismo manejada por Octavio Romero Oropeza.
Pero ayer, cuatro días después de conocido, persistían los problemas y se tomó la decisión de parar las principales actividades de esa empresa productiva de Estado.
Y afecta prácticamente todo: contratos, licitaciones, convenios y distribución en buena parte del territorio nacional.
Tan grave situación ha llevado a muchos funcionarios a hacer su trabajo a mano o en computadoras propias y las comunicaciones por teléfono.
Y así seguirán, se les dijo todavía anoche, tal vez una semana.
La designación de Piedra Ibarra
¡Qué vergüenza!
Este texto se escribe antes de saber el desenlace en el Senado de la República, pero conocida la instrucción específica a la mayoría dominante:
-Debe ser María del Rosario Piedra Ibarra. No hay alternativa.
¿O no escucharon la declaración presidencial cuando se dio el perfil de alguien sin currículum administrativo pero víctima de violación de sus garantías fundamentales?
Y como dijimos aquí el jueves pasado, la instrucción de ya saben quién no acepta refutación y Ricardo Monreal supo controlar a los senadores del gobierno.
Los propios del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y los adláteres de los partidos del Trabajo (PT), Verde Ecologista de México (PVEM) y Encuentro Social (PES).
Las órdenes se cumplen, adelantamos en aquella ocasión.
Pero la oposición documentó el fraude cometido a cámara abierta –ni siquiera en la oscuridad como lo cometió Evo Morales en Bolivia- y se revivieron debate y votación.
Aunque se hubiese repetido el procedimiento, Piedra Ibarra iba a llegar en primera, segunda o tercera votación sin la legitimidad de alguien llamado a ser ombudsman.
En México esa máxima autoridad moral y política de la república se concentra en el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Pero morderá la mano del amo
Pero hay reflexiones llamativas.
He escuchado a varios senadores, gobiernistas a ultranza y opositores, sobre esta designación fundamental cuando los mexicanos vemos avanzar la aniquilación de órganos autónomos y necesitamos un defensor ciudadano.
Los de Morena reclaman su mayoría y el sometimiento de las minorías, como ellos fueron mayoriteados cuando eran superados en el Poder Legislativo.
Lo sorprendente es el análisis de algunos legisladores de oposición.
Dante Delgado mismo, dueño y jerarca de Movimiento Ciudadana (MC), no ve tan mal el nombramiento de María del Rosario Piedra Ibarra, cuya madre senadora coronó como presidente legítimo al tabasqueño hoy constitucional.
Él y muchos más, incluidos priístas, consideran inflexible a Piedra Ibarra por su indeclinable lucha y la creen capaz de enfrentarse al gobierno federal.
-Hasta podría marchar con los padres de los 43 para exigir esclarecimiento de aquel crimen múltiple –me dijo uno.
-A los seis meses López Obrador estará arrepentido de haberla impuesto. Cuando la perra es brava… -reflexionó otro.
Termino este texto y el debate sigue en el Senado.