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CIUDAD DE MÉXICO, 12 de diciembre de 2019.- Finalmente no se hizo el milagro para Morena y por no alcanzar la mayoría calificada requerida, la Cámara de Diputados desechó el dictamen que buscaba reformar el artículo 41 constitucional en materia de financiamiento a partidos que proponía reducir en 50 por ciento los recursos a partidos políticos.
Durante la votación en lo general de dicho dictamen, hubo 274 votos a favor, 207 en contra y dos abstenciones, con lo que no se logró alcanzar la mayoría calificada necesaria para avalar reformas constitucionales, las cuales requieren las dos terceras partes de votos de los legisladores presentes en el Pleno.
En esta ocasión no le alcanzaron los votos a Morena aún con sus aliados, y es que uno de ellos, el PT, decidió votar en contra pues, aunque reconocieron que siempre acompañarán las propuestas presidenciales, calificaron ésta como absurda, al asegurar que se necesitan recursos para hacer política, incluso, dijo, para las visitas casa por casa.
«Nosotros no tenemos ninguna duda en apoyar las políticas de austeridad que el compañero Presidente impulsa, tampoco tenemos ninguna duda de que la austeridad debe llegar también al régimen de partidos, sin embargo, estamos en contra de la demagogia, de la hipocresía, de la retórica y de la despolitización (…). Es absolutamente equivocado, demagógico, plantear la desaparición del financiamiento público.
«Yo les pregunto a mis compañeros de nuestra coalición, si surgimos del corazón del pueblo, sin el financiamiento público, porque aun para visitar casa por casa, aun para realizar brigadas, aun para hacer ese trabajo político, se requiere, no solo sea de saliva, se requiere de recursos económicos y es absolutamente irresponsable decir que podemos renunciar al financiamiento público”, enfatizó el diputado del PT, Gerardo Fernández Noroña.
Dejó en claro que, ellos no estaban en contra de reducir el financiamiento, al contrario, pedían que fuera en un 60 por ciento menos, pero que el 40 por ciento restante se distribuyera de forma equitativa entre todos los partidos, y no por el número de votos recibidos.
La diputada del PRI y vicepresidenta de la Mesa Directiva, Dulce María Sauri Riancho, afirmó que, de aprobarse esta reforma, se afectaría al sistema político electoral en su conjunto, pues sostuvo que es una parte fundamental de ésta.
«El financiamiento a los partidos es un componente fundamental de la estructura y funcionamiento del sistema electoral mexicano en su conformación moderna, por tanto, es ingenuo o tal vez perverso, suponer que su modificación no trastocará radicalmente la forma de ver y entender la democracia y los procesos electorales en el futuro inmediato”, aseveró.
Así, después de una discusión de poco más de tres horas y media, hasta cierto punto breve a lo que se esperaba, se abrió la votación en lo general del dictamen y luego de abrir el tablero por el máximo de tiempo permitido, 10 minutos, el dictamen no alcanzó la mayoría calificada y fue desechada, con lo que queda muerta dicha propuesta.
El dictamen desechado, proponía modificar la fórmula mediante la cual se obtiene la cantidad que le corresponde a cada partido político que es multiplicando el número total de ciudadanos inscritos en el padrón electoral por el sesenta y cinco por ciento (65 por ciento) del valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), y la propuesta establecía que fuera por el 32.5 por ciento.