Escenario político
El pasado 9 de enero, el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, reconoció, ante la comunidad estudiantil, académica y laboral de la principal casa de estudios del país, que se deben seguir atendiendo los reclamos de las mujeres que se sienten agraviadas y exigen, con razón, igualdad y respeto.
Dijo que en esos momentos en los que hay dificultades en algunos planteles, es importante mantener el espíritu comunitario, pues frente a las muestras de intolerancia es preciso actuar con prudencia.
“Estoy comprometido con la igualdad de género, el respeto a las mujeres y a nuestra diversidad. Durante esta administración se han implementado mecanismos para combatir la violencia de género y erradicarla, los cuales, por supuesto, pueden ser siempre perfeccionados. Lo he dicho y lo reitero: las mujeres deben sentirse plenas y seguras al interior de su universidad y fuera de ella. La violencia contra ellas es inadmisible y no debe tener cabida en la UNAM”, indicó Graue Wiechers e insistió que se deben seguir atendiendo los reclamos de las mujeres que se sienten agraviadas y exigen, erradicar la violencia de género.
Esgrimió que antes y durante el periodo vacacional de diciembre, se está dando respuesta a cada uno de los puntos del pliego petitorio que fue presentado “y hemos procurado abrir los canales institucionales para resolver las diferencias a través del diálogo y reanudar la vida académica que le es consustancial a nuestra Universidad.
Sin embargo, el rector Graue Wiechers sostuvo de manera enfática que no puede estar de acuerdo con el cierre de los planteles, que afecta directamente a las comunidades y que provoca entre profesores, estudiantes y sus familias, indignación y malestar entre quienes sí desean regresar a clases. Miles de alumnos se han visto afectados por esta muy larga suspensión de actividades. En el caso de la Facultad de Filosofía y Letras, la situación amenaza ya con la inminente pérdida del semestre.
Indicó que independientemente de que se ha dado respuesta a las peticiones de los estudiantes, la Rectoría y las autoridades de la Escuela Nacional Preparatoria, continuarán buscando las soluciones para recuperar, a la brevedad posible, la vida académica.
“El diálogo permanente y la concertación son los mecanismos que los universitarios nos hemos impuesto para dar solución a los conflictos. Entiendo las posiciones encontradas y la inconformidad que conllevan los paros prolongados y los invito a evitar todo tipo de provocaciones y polarizaciones en torno a un tema en el que todos estamos de acuerdo: erradicar la violencia de género de nuestra Universidad”, expuso el rector.
Sin embargo, grupos de encapuchados han tomado varias preparatorias, los colegios de Ciencias y Humanidades y las facultades de Ciencias Políticas y de Filosofía y Letras. Llamó la atención que un grupo armado tomó por asalto el viernes pasado la Prepa 8 y los académicos identificaron, entre otros, al exalumno Leonardo Alid de la Concha y a un tal Roberto, ex alumno de Prepa 5, cercano de Jaime Vázquez Díaz.
Este Jaime Vázquez Díaz, dejó de ser funcionario de la UNAM. Fue colaborador cercano al doctor José Narro Robles cuando fungió como rector de la propia UNAM, además de ser el responsable de la seguridad a partir del 2010. Infiltró a todas las organizaciones estudiantiles con el objetivo de utilizarlos para negociar con autoridades plazas, dinero y contratos a cambio de mantener la tranquilidad en los planteles y en la Universidad.
Vázquez Díaz creó los grupos de pseudo anarquistas encapuchados que violentan a las comunidades pero que a la vez dicen que van contra la violencia de género. En la UNAM, sostienen pero que está detrás de los grupos de anarcos que hoy tienen en su poder las prepas 2, 3, 6, 7, 8 y 9, además de contar con grupos afines en las facultades de Ciencias Políticas y de Filosofía y Letras
En el blog Universitarios UNAM de Facebook, se denuncia que hay paristas de la prepa 7 y la 9 intentando cerrar otras prepas y que los líderes de los paristas en todas las dependencias son infiltrados de Jaime Vázquez y reciben su remuneración económica por medio de colaboradores, a los cuales se les ve merodeando los planteles en paro o incluso dentro de los planteles en paro. Existen unas siete personas identificadas ya que trabajan para Vázquez y que entregan dinero a paristas y también les dan indicaciones.
En dicho blog se asegura que la facultad de Filosofía está controlada desde hace años por Vázquez. Él impone al director y a sus colaboradores. Él tolera y protege a los vendedores ambulantes ilegales, los del Che Guevara y los que se apropiaron de espacios estudiantiles. Le hacen la chamba dos exactivistas estudiantiles, conocidos como Urquiza y Tafoya. Ahora se entiende porque esos grupos no han podido ser desterrados de la UNAM y son los que están distribuyendo drogas con la complicidad del personal de vigilancia que por más de una década fueron allegados a Vázquez Díaz, de acuerdo a las propias denuncias estudiantiles.
La pregunta es ¿Para quién trabaja Vázquez Díaz?
La libertad de expresión
El pasado 29 de enero, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que ni él ni su gobierno apoyan o promueven alguna reforma judicial que ataque la libertad de expresión en México o que atente contra los derechos humanos. Durante la conferencia de prensa del mandatario, la articulista y académica Denise Dresser, preguntó a López Obrador si se comprometía a no impulsar leyes que acosen a periodistas, luego del caso del también académico y articulista Sergio Aguayo.
“La semana pasada, se filtraron documentos de trabajo de la Fiscalía General de la República (FGR) donde se proponen una serie de reformas para seguir acosando a periodistas, incluyendo revivir la difamación como un delito que podría ser castigado con cárcel. “¿Se compromete a que no se hará un uso faccioso del aparato del Estado para perseguir una persona como a veces parecería que ocurre desde esta tribuna?”, preguntó Denise Dresser.
López Obrador respondió: “lamento mucho, Denise, que me confundas con los gobernantes anteriores (…) Para empezar, lo que dices no es cierto, no tengo nada que ver con la supuesta reforma” y agregó: “ya no es el tiempo de antes, de la simulación. Yo no estoy acostumbrado a tirar la piedra y a esconder la mano, yo doy la cara. Tengo diferencias con el conservadurismo.
Dresser pidió de nuevo al presidente el compromiso de no apoyar leyes que criminalicen a periodistas, a lo que él dijo que sí “por convicción”, y recordó que el fiscal no tiene facultad para presentar iniciativas de reforma, pues eso solo le corresponde al titular del Ejecutivo y a los legisladores. “Nosotros venimos de un movimiento donde enfrentamos el autoritarismo, denunciamos falta de democracia (…) No, eso no va a pasar, no va a pasar porque no somos iguales, o sea, eso te lo puedo garantizar (…) Vamos a respetar siempre el derecho a la libre manifestación de las ideas y no se va a censurar a nadie, no lo hemos hecho”, afirmó el presidente