Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
RETOS DEL CAMPO NACIONAL DESPUÉS DE LA PANDEMIA
Por: Abigail A. Correa Cisneros
En medio de la pandemia que vivimos se comprobó que uno de los sectores que no pueden parar es el agrícola. Sin la gente que trabaja en esta área, la población mundial, en situaciones como la actual, estaría también en riesgo de morir de hambre, por lo que debemos valorar el esfuerzo y dedicación de los campesinos.
Desde que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio en América del Norte, en 1994, los gobiernos mexicanos se fueron olvidando del campo e invirtieron más en otros sectores, como el energético. Desde entonces vemos cómo se beneficiaron empresas y políticos que, aprovechando el apoyo de los que estuvieron en el poder, remataron Pemex.
También el medio ambiente se vio afectado. Con el aval del gobierno se fueron degradando ecosistemas debido a la explotación de las empresas mineras. La contaminación del agua, el desplazamiento de comunidades o el deterioro de la salud de la gente que tarde se enteró de las causas, todas relacionadas con estas compañías, son el resultado de las políticas que enriquecieron solo a unos cuantos.
Hoy estas empresas están paradas. Pemex reportó pérdidas millonarias la semana pasada, más de 526 mil millones de pesos en el primer trimestre del año. Por otro lado, el campo debe seguir produciendo, pero la pandemia pone en riesgo a los campesinos porque desde hace años no tienen acceso a hospitales o servicio médico. La alimentación es precaria, lo mismo que el acceso a la educación.
La OMS destaca el importante papel de la agricultura en relación con la salud. Para empezar, la situación sanitaria de la población influye en la demanda de productos agrícolas, y en las comunidades agrícolas diversas enfermedades que padece la población reducen el rendimiento del trabajo, así como los ingresos y la productividad, lo que conlleva a una espiral de deterioro de la salud.
Más de un tercio de la población mundial se dedica a la industria agrícola. La mayoría viven en pobreza. La agenda rural en el mundo no existe como tendría que ser. Según la Organización de las Naciones Unidas, para el 2030 más del 80 por ciento de los habitantes de América Latina y el Caribe (ALC) vivirán en localidades urbanas. La mayor parte de los sistemas agroalimentarios están en el ámbito rural, para dentro de una década, el sector podría caer en una crisis sin retorno.
En la región de América Latina y el Caribe, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo, a pesar de la expansión de la cobertura de los programas sociales, la población rural sigue en desventaja en relación con la población urbana. El 32.6 por ciento de la población rural no posee cobertura legal de servicios de salud y solo el 11 por ciento vive en hogares que reciben prestaciones de seguridad social, en comparación con el 9.8 por ciento y el 19 por ciento en áreas urbanas, respectivamente.
En el campo prevalecen las enfermedades crónicas debido, en gran medida, a la falta de una buena alimentación. La desnutrición crónica infantil rural es mayor que en las áreas urbanas en prácticamente todos los países de la región. Asimismo, la prevalencia de la obesidad ha crecido en ALC, aun en lo rural, transformándose en una de las principales causas de muerte por enfermedades crónicas no transmisibles, según informó la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
La tenencia, el uso y la administración de la tierra también deben adecuarse para permitir el desarrollo socioeconómico, aumentar los incentivos hacia la inversión productiva y social, reducir los riesgos de la degradación ecológica, mejorar el acceso y el manejo de los recursos naturales, facilitar los procesos de recaudación de impuestos y la generación de condiciones para la protección de las comunidades vulnerables, a través de programas sociales.
En México el sector agrícola contribuye con 3.1 por ciento a la economía en su conjunto. Sin embargo, al considerar la contribución del sector agropecuario ampliado, que incluye actividades primarias, de transformación (agroindustria), insumos y servicios, el aporte de este sector al Producto Interno Bruto (PIB) es de alrededor de 7.5 por ciento. Los recursos federales que se destinan al desarrollo del campo mexicano representaron en 2019 apenas 1.4 por ciento del PIB.
El presupuesto del Programa Especial Concurrente para el Desarrollo Rural Sustentable (PEC) 2020 tuvo un decremento de 12,200 millones de pesos (mdp) contra el aprobado en 2019. Las secretarías que tuvieron recortes dentro del PEC fueron la de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) por 17,858 mdp; Desarrollo Agrario y Territorial por 6,133 mdp; Entidades no Sectorizadas por 2,182 mdp; Economía por 967 mdp; de Medio Ambiente y Recursos Naturales por 965 mdp; y Trabajo y Previsión Social por 35 mdp.
México va por buen camino a pesar de la adversidad, porque incluso con la crisis global actual, el valor de la producción del campo en 2020 se estima alcanzará 35,900 mdd, un incremento del 3.2 por ciento respecto al valor de 2019, el cual se explica por un aumento en los cultivos agroindustriales y hortofrutícolas. Para el sector pecuario se estima un valor superior a 29,300 mdd, lo que significará un incremento del 7 por ciento respecto del año anterior.
En lo que respecta al nuevo Tratado de Libre Comercio, México podría liderar las políticas públicas del medio ambiente, sustentabilidad y reducción de efectos del cambio climático. La eliminación del trabajo infantil y las mejoras en los derechos laborales de los agricultores fueron clave en las negociaciones que finalmente se aprobaron.
Actualmente, México es el decimoprimer productor mundial de alimentos, de cultivos agrícolas y de ganadería primaria, además de que ocupa el lugar decimoséptimo a nivel internacional en producción pesquera y acuícola. En cuanto a las exportaciones, somos el octavo país que más vende alimentos a nivel global, ocupando el primer lugar mundial en la producción de aguacate, limón y zarzamora y colocándose como el segundo que más cosecha chile verde y frambuesa.
DESDE EL CENTRO
El Consejo de Salubridad General aprobó este martes cuatro acuerdos para el levantamiento progresivo de las medidas de contención de cuarentena frente a la epidemia de COVID-19 en México. Serán actividades esenciales la construcción, minería y fabricación de equipo de transporte. Podrán regresar a clases y labores en municipios sin contagio que tengan vecindad con municipios también libres de contagio… Debido al cierre de diversas industrias y comercios a causa de la pandemia de coronavirus, en abril se perdieron en el país 555,247 empleos formales, informó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)… En el Día mundial de la enfermera se supo que en México hay 2.4 sanitarias por cada 100,000 habitantes, aunque al menos debería existir una proporción de, por lo menos, 4.4. La OMS reportó en el informe Situación de la enfermería en el mundo 2020: invertir en educación, empleo y liderazgo, que México enfrenta la pandemia con escasez de profesionales en enfermería… Fabiana Maribel Zepeda Arias, conocida como la “Jefa Fabiana” informó que dio positivo a Covid-19, esperamos su pronta recuperación.