Disminuye desigualdad salarial en 2 tercios de los países del mundo: OIT
CIUDAD DE MÉXICO, 6 de agosto de 2020.- Ante la pandemia de Covid 19 que afecta a todo el mundo, el comercio internacional de América Latina y el Caribe tendrá una pronunciada caída de 23 por ciento en 2020, más de la anotada durante la crisis financiera de 2009 -cuando disminuyó 21 por ciento, informó este jueves la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en un nuevo informe.
La Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, dio a conocer en conferencia de prensa el Informe especial COVID-19 N⁰ 6 de la institución, titulado Los efectos del COVID-19 en el comercio internacional y la logística, en el cual proyecta que el valor de las exportaciones regionales se contraería -23 por ciento este año y el de las importaciones -25 por ciento, cifra también superior al -24 por ciento anotado durante la crisis financiera de 2008-2009.
La disminución se da en un contexto global en el cual el comercio mundial acumula una caída de 17 por ciento en volumen entre enero y mayo de 2020. América Latina y el Caribe es la región en desarrollo más afectada por esta coyuntura y estará marcada principalmente por los retrocesos en los envíos de manufacturas, minería y combustibles.
El desplome del turismo (-50 por ciento) arrastrará a las exportaciones de servicios, especialmente del Caribe, mientras que el comercio intrarregional mostrará también una fuerte contracción de -23,9 por ciento, especialmente de manufacturas. Todo esto resultará en una pérdida de capacidades industriales y una reprimarización de la canasta exportadora de la región, advierte el informe.
“Profundizar la integración regional es crucial para salir de la crisis. Con pragmatismo, debemos rescatar la visión de un mercado latinoamericano integrado. Además, la región debe reducir costos mediante una logística eficiente, fluida y segura”, señaló Alicia Bárcena durante la presentación del informe.
Según el documento de la CEPAL, el valor de las exportaciones e importaciones de bienes de la región se redujo un 17 por ciento entre enero y mayo de 2020 en comparación con el mismo período de 2019. Ambos flujos se desplomaron hacia el final del período de cinco meses en 2020, con una caída interanual del 37 por ciento solo en mayo.
En los primeros cinco meses del presente año se registraron fuertes caídas en el valor de los envíos de América Latina y el Caribe a Estados Unidos (-22,2 por ciento), la Unión Europea (-14,3 por ciento) y la propia región (-23,9 por ciento), que conjuntamente absorbieron el 69 por ciento de sus exportaciones totales de bienes en 2019. Por el contrario, los envíos a Asia han mostrado una mayor resiliencia. En particular, las exportaciones a China cayeron menos de 2 por ciento entre enero y mayo, y se recuperaron en abril y mayo, consistente con la gradual reapertura de su economía, lo que constituye un signo positivo, especialmente para los países sudamericanos exportadores de materias primas.
Para el año 2020 completo, se prevé que la mayor contracción de las exportaciones regionales se registraría en las destinadas a Estados Unidos (-32 por ciento) y a la propia región (-28 por ciento), en tanto que los envíos a China caerían solo -4 por ciento.
En el análisis sectorial de la región, la mayor caída entre enero y mayo en comparación con igual período de 2019 fue anotada por la minería y el petróleo (-25,8 por ciento), seguido por las manufacturas (-18,5 por ciento). En cambio, el sector de productos agrícolas y agropecuarios marcó una leve alza de 0,9 por ciento. Ello refleja la menor sensibilidad de la demanda de alimentos a la contracción de la actividad económica, al tratarse de bienes esenciales, indica el reporte.
A nivel de países, el informe de la CEPAL indica que solo cuatro, todos centroamericanos, aumentaron sus exportaciones entre enero y mayo de 2020: Costa Rica (2 por ciento), Honduras (2 por ciento), Guatemala (3 por ciento) y Nicaragua (14 por ciento). Esto se explica por una combinación de mayores ventas de suministros médicos y equipos de protección personal (especialmente mascarillas), de productos agrícolas (cuya demanda no se ha visto tan afectada por la pandemia), y la relativa resiliencia que ha mostrado el comercio intra-centroamericano.
Las importaciones, en tanto, se reducen en todos los países en este mismo período (-17,1 por ciento en valor promedio regional), producto de la profunda recesión por la que atraviesa la región. Particularmente preocupante resulta la contracción de las importaciones de bienes de capital y de insumos intermedios (-14,5 por ciento y -13,6 por ciento, respectivamente), que afectará la tasa de inversión y comprometerá la recuperación, advierte la publicación.