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CIUDAD DE MÉXICO., 19 de agosto de 2020.- En el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, el secretario de Estado de EU, Mike Pompeo, expresa que su país honra la memoria de los trabajadores humanitarios que hicieron el último sacrificio en respuesta al llamado a proteger las vidas y aliviar el sufrimiento de las personas más vulnerables del mundo.
En un mensaje, dedicados a los trabajadores, el funcionario reconoció el compromiso infatigable de quienes pusieron las vidas de los demás antes que las suyas y que persistieron en su trabajo de salvar vidas a pesar de los riesgos crecientes a su propia salud y seguridad. «Ellos deben poder continuar su noble trabajo con protección y seguridad».
Puntualizó que los países en situación de conflicto armado deben cumplir con sus obligaciones derivadas del derecho humanitario internacional y trabajar para garantizar la protección y seguridad del personal humanitario.
“Los ataques dirigidos contra los trabajadores de la salud y humanitarios ponen a millones de personas en riesgo al negarles los cuidados y la asistencia que les salvará la vida. Esta tendencia está empeorando aún en medio de la pandemia mundial”, recalcó.
Pompeo aseguró que Estados Unidos tiene una larga tradición de liderazgo en la respuesta a crisis humanitarias internacionales.
En el año fiscal 2019, Estados Unidos donó 9.25 mil millones de financiamiento para alimentos, refugios, cuidados de la salud, educación, agua potable y servicios sanitarios en beneficio de decenas de millones de personas afectadas por crisis en todo el mundo, incluso para los desplazados por conflictos.
En la última década, Estados Unidos comprometió más de 70 mil millones de dólares en asistencia humanitaria en todo el mundo.
«Constantemente somos el mayor donante al Alto Comisionado para Refugiados de las Naciones Unidas, la Organización Mundial para las Migraciones, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas, el Programa Mundial de Alimentos, UNICEF y el Comité Internacional de la Cruz Roja, así como muchas organizaciones no gubernamentales internacionales y nacionales, entre las organizaciones humanitarias más importantes del mundo», resaltó.
La asistencia estadounidense incluye el apoyo para garantizar la protección y seguridad de los trabajadores humanitarios mientras brindan valientemente los cuidados a las personas más vulnerables en situaciones peligrosas desde Siria hasta Venezuela y desde el noreste de Nigeria hasta Birmania, incluso durante conflictos armados.
“El profundo compromiso del pueblo estadounidense para ayudar a los necesitados va más allá de la asistencia oficial que da el gobierno de Estados Unidos. También se ve en la asistencia que dan ciudadanos privados, la sociedad civil estadounidense y las organizaciones no gubernamentales, incluso las organizaciones religiosas, el sector privado y numerosos estadounidenses que han dedicado sus vidas al trabajo humanitario”, destacó.