Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
Messi. El valor de unos pies frente a la vida de millones
La velocidad y los pies de un tipo valen en el mundo más que la vida de millones que están expuestos al contagio y no pueden impedirlo porque necesitan trabajar. Un sistema económico y un sector, el deportivo, que han privilegiado la ganancia sobre la vida, se convulsionan porque el jugador argentino Lionel Andrés Messi, quiere dejar su perdedor equipo de Barcelona. Ha sido la nota principal de muchos medios en el mundo ¡Que terrible, han muerto casi un millón de personas y la gente gime y se desgarra porque Messi quiere renunciar! Si los grandes científicos fueran tan cotizados como Messi, en este momento quizá no tendríamos problemas con la vacuna ¿Se hubiera estremecido el mundo y los ingleses estarían en estado de Shock como los argentinos, si Hawking, en su momento, hubiera sido amenazado por una empresa por cancelar un contrato? Frente al espectáculo ganancioso, el pensador, el que ayuda, el que cuida la vida, no causan impacto mundial. En México Hugo López-Gatell, el funcionario y medico responsable de la información de la pandemia, ha sido difamado, ofendido a todos los niveles y hay quienes solicitan que renuncie. En esta etapa de la pandemia, los médicos y las enfermeras han sido agredidos, acosados y golpeados. La Secretaría de Salud anuncia que mas de cien mil trabajadores de la salud se han contagiado del virus y mil 320 han perdido la vida ¿Alguien está preocupado por eso? Los solidarios médicos cubanos fueron agredidos e insultados por algunos en México, igual como lo hicieron en otros países. Ninguno es genio de la velocidad y en manejo de los pies, pero saben curar.
Pasar del endiosamiento personal a un deporte sano de mayorías
Todos los medios sin excepción, cifran su información deportiva en los deportes-espectáculo. Se queda uno sorprendido de ver la saturación de sus páginas o tiempos, con el futbol europeo y los deportes estadounidenses. Lo demás son pequeñas notas y triviales informes, para ellos. No está mal que la gente se distraiga y tenga ídolos, tampoco se denigra a estos por ser grandes astros con cualidades privilegiadas. Es la manera de esa información abusiva y de la presentación de esos ídolos como pequeños dioses. También la ganancia y los salarios indiscriminados, con denuncias a veces, de malos manejos de las empresas que organizan esos espectáculos y los órganos que por norma los promueven y aceptan. El gran negocio del deporte sustituyó el juego llanero o el deporte que debería de ser más estimulado y tener más prepuesto. Se brindaría un reconocimiento al atleta local que hace un esfuerzo y la extensión de ese bienestar a familias enteras, no importa la edad, para adquirir una salud con el movimiento. México, sobre saturado de obesos, gordos, adiposos, tendría un cambio profundo, no solo en la salud, sino en la conviavilidad social de millones que harían del deporte sencillo, organizado, una relación común.
Un científico puede ofrecer soluciones eternas, frente a lo temporal
El impulso y desarrollo de la ciencia como algo primordial, podría haber surtido mucho efecto en estos momentos cruciales de pandemia. Los que tienen y desarrollan físicos privilegiados para el deporte. la danza, el baile y otras actividades en las que un cuerpo poderoso es fundamental, deben de conocer la historia de estos dos grandes científicos Albert Einstein y Stephen Willian Hawking, que descubrieron teorías fundamentales para la humanidad, pero que carecían de toda la capacidad corporal física. Einstein que nació en 1879 y murió en }955 sufría dislexia y durante su niñez y adolescencia fue un alumno con graves retrasos de aprendizaje que hacía sospechar un grave desajuste. Pero en su juventud y madurez la plenitud surgió ante él y después de avatares peligrosos por ser judío en la época de Hitler, se refugió en Estados Unidos y con el tiempo dio a conocer la Teoría General de la Relatividad Está considerado por muchos el gran genio del siglo XX. Recibió el premio Nobel en 1921. Hawking es uno de lo casos más extraordinarios que ha dado el mundo de la ciencia. Minusválido en extremo, solo se comunicaba por el movimiento de las cejas y a través de tarjetas, ocupó en su momento la misma silla que ocupó Isaac Newton en la universidad de Cambridge, pero con posturas diferentes. El no creía en la existencia de dios, ni que hubiera habido un ser supremo que creara el universo. Fue la suma de fuerzas lo que hizo posible esa creación, dijo en muchos momentos el científico que revolucionó la ciencia con la teoría del espacio-tiempo, el Big Bang y los agujeros negros. Su Historia del tiempo, escrita en 1988, causó gran impacto. Se habla de que se vendieron en poco tiempo 25 millones de libros. Hawking murió en marzo el 2018 y es famosa su frase que quizá no les gustará a las feministas: “El universo es más fácil de entender que las mujeres”.