Poder y dinero
Ecoturismo, la opción
Un fantasma recorre el mundo. El miedo al contagio del Coronavirus ha sacudido la estructura mental de todos los habitantes del planeta y si alguien siente mayor temor, es aquel que tiene que viajar en su país o fuera de él.
La emergencia sanitaria, social y económica sin precedentes que vive el mundo derrumbó como un castillo de naipes a la actividad turística. Las cancelaciones de vuelos, de reservaciones de hoteles y de uso de servicios turísticos, se ha producido en cascada durante este año, que quedará en la memoria de todos.
La Organización Mundial del Turismo (OMT), ofrece una cifra que causa escalofríos: en 2020 se producirá una caída entre 58 y 78 por ciento en las llegadas de turistas. Esto sería, con mucho, el peor resultado de la serie histórica del turismo internacional desde 1950 y pondría un final abrupto a 10 años de crecimiento sostenido desde la crisis financiera de 2009 para que se recupere la demanda internacional turística a partir de 2021.
El mundo se enfrenta a una emergencia sanitaria, social y económica sin precedentes. El turismo está entre los sectores más afectados, con aviones en tierra, hoteles cerrados y restricciones de viaje en prácticamente todos los países del mundo, reconoce la OMT. La mayor parte de las personas que viaja, lo hace por necesidad, no por placer.
Pero ¿está todo perdido en el sector turismo por la pandemia? Considero que no, porque la actividad turística se está reinventando para operar en tiempos del Coronavirus.
Actualmente, hay un turismo menos aglomerado, con espacios abiertos: un turismo que busca la naturaleza, debido al confinamiento que tiene y que no rompe con los principios sanitarios de cuidar la sana distancia.
El confinamiento en México por el Covid-19, en especial en las zonas urbanas como la Ciudad de México, generó repercusiones en los estados emocionales de las personas, con ataques de ansiedad, por lo cual la tendencia turística actual se traduce en viajes de recreo máximos de entre tres y cuatro horas. Es decir, la gente viaja con toda precisión a lugares escogidos y se regresa en poco tiempo a sus hogares.
Un experto, Humberto Hernández Haddad, subsecretario de Calidad y Regulación de la Secretaría de Turismo (Sectur), advirtió recientemente que, si no hay una homologación y debida estandarización de las medidas de seguridad sanitarias para el turismo en las Américas, el turismo seguirá resintiendo una grave pérdida de confianza.
El turista recuperará la confianza cuando sepa que puede salir y regresar de un viaje, de haber disfrutado de una experiencia turística, sin haber sido contagiado, precisó el funcionario.
La Asociación Mexicana de Turismo de Aventura y Ecoturismo (AMTAVE), cuenta con metodologías de protección a la salud y, por el tipo, de turismo que desarrolla, fue considerada por Hernández Haddad, como una nueva cara del turismo.
En la presentación del informe de Ernesto Calva Silva, como presidente del Consejo Directivo 2018-2020 de la AMTAVE, Hernández Haddad, invitó a la asociación para incorporarse al equipo de trabajo de la Sectur para la creación de la Agenda Estratégica de Turismo de las Américas 2050.
En agosto pasado, Miguel Torruco Márquez, titular de la Sectur, en su carácter de presidente de la Comisión Interamericana de Turismo de la OEA, se reunió con ministros de turismo de América Latina y El Caribe, y representantes de Estados Unidos y Canadá, para integrar grupos de trabajo. En esta tarea, la AMTAVE aportó su opinión técnica, informó Hernández Haddad.
La AMTAVE presentó a Sectur, los criterios sanitarios que regirán a las empresas en su reapertura operativa, cuyo objeto es dar certidumbre, seguridad y confianza de que se privilegia la salud y vida de la planta laboral y de los turistas nacionales y extranjeros.
La Sectur adapta los criterios de sanidad a la realidad que plantea la emergencia sanitaria. Su estrategia es el impulso de turismo nacional y ya que se está dando, seguir con el internacional, comenzando con Estados Unidos y Canadá y con los países latinoamericanos para la protección del turista de la región.
Por su parte, las 100 empresas agrupadas en la AMTAVE, por efectos de la pandemia, se centran ahora en estos viajes cortos, incluso de pocas horas de duración, y con énfasis en criterios de protección en instalaciones, personal, pero especialmente en paseantes.
El encierro provocado por el Coronavirus, ha hecho que muchos turistas busquen la naturaleza, como atractivo principal de sus visitas, en prácticamente los 32 estados de la República.
El turismo ecológico y de aventura se convierte para muchos en una ruptura del terrible tedio de cuatro paredes en que los ha encerrado la pandemia. Sienten que en la naturaleza tienen un bálsamo, que los ayudará a liberar el terrible estrés que viven en las ciudades. Tienen la certeza que realizar actividades al aire libre, al tiempo que los reconforta, los protege de la posibilidad de contagiarse.
Los viajeros que buscan el ecoturismo o de aventura, ahí van por todo México haciendo ciclismo, caminata, explorando cuevas, escalando en roca, descendiendo en rapel, buceando, volando en globo, saltando de un avión en paracaídas, planeando en ala delta, surfeando olas bravas, recorriendo cañones enormes, visitando cascadas, sintiendo correr la adrenalina por sus cuerpos y teniendo en mente que el espacio que les da la naturaleza los hace ser más libres y les confirma que con tantos meses de encierro, ahora que están afuera, el maldecido Coronavirus no será capaz de atraparlos.