
Fuerte operación en Chilpancingo, tras atentado contra alcalde de Atlixta
CIUDAD DE MÉXICO, 12 de noviembre de 2020.- Sobre el cuerpo del menor hallado en una maleta, Alessandro N., la Fiscalía General de Justicia informó que fue identificado tras diversos análisis periciales y el reconocimiento de ley por parte de los familiares.
Añadió que esta madrugada, personal de la Fiscalía de Justicia Penal para Adolescentes, adscrita a la Coordinación General de Investigación de Delitos de Género y Atención a Víctimas, en colaboración con policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y agentes de la Policía de Investigación (PDI), ejecutaron órdenes de cateo en tres inmuebles, dos de ellos localizados en las calles Magnolia y Tercer Callejón de San Juan de Dios, ambos en la colonia Guerrero, así como otro en la calle Doctor Atl, colonia Santa María La Ribera.
En dichos cateos, participaron agentes del ministerio público, así como expertos en las materias de criminalística, fotografía, química y genética de la Coordinación General de Investigación Forense y Servicios Periciales, quienes recabaron diversos indicios.
Como rastros hemáticos, ropa y dispositivos electrónicos, los cuales ya se analizan para ser integrados como elementos de prueba a la indagatoria, con la finalidad de identificar la mecánica de los hechos y relacionarlos con la posible participación de otras personas.
En mensaje a medios, el vocero de FGJ, Ulises Lara López, destacó que, derivado de los indicios recabados, fue posible establecer que uno de los inmuebles, ubicado en la colonia Guerrero, es el lugar donde la persona menor de edad fue privada de la vida.
«En estos momentos, el representante social de la Fiscalía continúa la integración de la carpeta de investigación iniciada por el delito de secuestro agravado para determinar la situación jurídica de las dos personas menores de edad detenidas el miércoles, mismo día de los hechos, con la finalidad de presentarlos ante un juez especializado en justicia para adolescentes.
Subrayó que estos hechos no guardan relación alguna con los acontecimientos ocurridos el pasado 1 de noviembre en la colonia Centro, cuando fueron encontrados los cuerpos, descuartizados, de dos niños mazahuas.