Frente a la guerra/Felipe de J. Monroy
Todos en el partido del gobierno lo saben:
Mario Delgado no tuvo autonomía para designar candidatos a los principales cargos de la elección de junio.
Se los impuso quien lo impuso.
Es decir, la voz reinante en el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) dio la orden y él simplemente la acató.
Inclusive le restan influencia en la postulación de Marina del Pilar, la aspirante a gobernadora de Baja California con quien mantiene gran cercanía.
Sí pudieron incidir, en cambio, otros habituales en Palacio Nacional.
Claudia Sheinbaum logró colocar a sus principales cuadros para trabajar por la Ciudad de México en la segunda mitad de su administración.
En los resultados electorales de junio se jugará gran parte de su futuro porque es, a vistas, la favorita para 2024 de su jefe y promotor.
También Ricardo Monreal pudo operar para su causa
Desde mucho tiempo atrás trabajó para su hermano David Monreal y por ello la candidatura en Zacatecas pareció natural.
El compromiso de ambos es ganar el estado.
NUEVA AGENDA IDEOLÓGICA
Pero la política tiene premios y castigos.
Si Morena ha mantenido las tendencias favorables de principios de la campaña, habría dos ganadores inobjetables: el titular del Ejecutivo y Mario Delgado.
Como no es así y las encuestas avizoran mayor competencia a la prevista, ellos dos serían los grandes perdedores.
Pero sólo habría un pagador perfectamente identificado por ya saben quién: el dirigente nacional del partido.
Será el objetivo de tribus y desilusionados cuando llegue la noche de los cuchillos de revancha por no haber alcanzado el objetivo de dominar la Cámara de Diputados.
No falta mucho tiempo para saberlo, pues lo veremos a continuación de las votaciones.
Pero también entonces conoceremos el rumbo ideológico, administrativo y político del régimen con reacomodos en posiciones importantes.
Esos ajustes determinarán la agenda inmediata del país y prepararán la decisión de correrse un poco al centro o más a la izquierda.
…si no hay prolongación de mandato.
COMERCIO DE CERTIFICADOS
En el México de la corrupción todo es posible.
Las secretarías de Salud de varios estados han reportado la generalización de una mala práctica en la cruzada de vacunación.
Desde el centro del país se dio la orden de aplicar esa inyección a cuanta mujer se presente con un certificado de embarazo.
-Sin excepción. Basta con la palabra de la mujer -se les repitió porque así lo decidieron el subsecretario Hugo López-Gatell y el secretario Jorge Alcocer, en ese orden.
Como los brigadistas no pueden negar el biológico ni obligar a estudios adicionales, van en a aumento de sospechas de abuso.
Muchos abogarán por mantener esta laxitud porque así aumenta la cobertura a la inmunización, pero se originan riesgos e injusticias.
El riesgo es aplicar la vacuna a personas con cardiopatías u otras enfermedades graves no declaradas.
Y riesgos de injusticia porque hay personal vulnerable -por ejemplo rezago de adultos mayores y personal médico- necesitadas de recibirla y no tienen para cuándo.
Todo por este comercio de certificados realizado por médicos y mujeres sin escrúpulos.