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CIUDAD DE MÉXICO, 3 de julio de 2021.- Desde que Laura Beristain Navarrete ganó la elección para alcaldesa en Solidaridad, Quintana Roo en 2018, comenzó una acción inusual hacia su persona por parte del gobierno del estado, que hoy, a tres años de aquella victoria que marcaría su vida, deriva en un llamado de auxilio al presidente Andrés Manuel López Obrador ante el fraude electoral que evitó su reelección y el golpeteo que ejercen en contra de su persona.
Los hechos no son pocos, pero los efectos cada vez se sienten con mayor fuerza en su vida pública, política y personal de la morenista, con la irrupción de la policía estatal y ministerial un día antes de la elección del 6 de junio a la casa de sus hermanos, así como la detención, aún sin aclarar, de varios de sus colaboradores de campaña.
En entrevista, la alcaldesa denuncia sufrir violencia política de género y ser perseguida por parte del gobernador Carlos Joaquín González y la Fiscalía estatal. Aunado a ello, exhibe una omisión por parte de los órganos de justicia electoral de la entidad ante el fraude que, asegura, se fraguó en su contra, por lo que acudió a las autoridades federales competentes para apelar a ella; sin embargo, su llamado trasciende este ámbito.
“Este es un SOS al presidente”, solicita mientras relata lo ocurrido en su mandato, hechos que se enrarecen y que de manera sistémica se han convertido en un golpeteo mediático a su administración, pese al apoyo de la ciudadanía en el municipio.
“Cuando dejo el Congreso local y decido ir a la contienda por el municipio fue una guerra totalmente cantada. Solidaridad, dicen, es la glorieta de Quintana Roo, porque Carlos Joaquín tiene sus negocios ahí, pero hay muchas personas que vivimos en ese lugar, no tiene dueño, tiene reglas; es un municipio de la gente y no entiendo las razones por las que hay esta guerra en mi contra. Durante aquel conteo de votos, por alguna razón lo paran y empieza a haber un jaloteo, entonces nos damos cuenta que le suman los votos del PAN a Morena y los de Morena al PAN, avalada por la líder de ese momento, Mayra Sanromán, entonces Marciano Peñaloza, nuestro abogado en ese momento con otros, acude a la mesa y dice está pasando esto, cuando reconvierten ganamos por 3 mil 500 votos”, relata.
Laura, la menor de cinco hermanos, añade que sus amigos en el Partido Acción Nacional le confían que en las preferencias electorales siempre ha estado dos puntos porcentuales arriba y por instrucciones del gobernador, debía pasar “algo extraordinario” para impedir que llegara a la alcaldía.
Ante el antecedente, Beristain Navarrete encuentra una explicación a lo que ocurrió en la pasada elección, pero también a la campaña de desprestigio en contra de su gestión.
“Una semana antes (de la elección) comenzaron a detener compañeros de la política y el ayuntamiento para preguntarles ‘qué hacían en la casa del alcalde’. Empezamos a sentir ciertos temores, sabemos en el país que vivimos, pero pensamos que no sería algo que pasaría a mayores. Tres días antes de la elección me llevan a cinco personas presas, el 6 de junio a otros 10 y el día 5, alrededor de las 20:00 horas, fui a la Guardia Nacional para pedir apoyo, porque empezamos a sentir la violencia con mayor fuerza. Después de ir a pedir la protección, negada en ese momento, entraron a casa de mis hermanos la policía estatal y la ministerial, para catearlas y amenazarlos con armas de fuego”.
De acuerdo con el conteo oficial, Lili Campos, candidata de la Alianza opositora, obtuvo la mayoría en la elección para presidenta municipal por lo que la actual alcaldesa decidió impugnar; sin embargo, tanto el Tribunal Electoral de Quintana Roo (TEQROO) como los distintos órganos de justicia locales, han sido dilatorios a sus peticiones, los cuales, acusa, “trabajan de manera paralela al mandato del gobernador”.
“Gané la elección por más de 10 mil votos. Alrededor de 240 urnas llegaron con cinta canela, violadas. Los órganos electorales y tribunales trabajan sin respetar ninguna metodología, violando todos los derechos político electorales de una servidora y de la gente misma. Entonces hemos armado un rompecabezas al respecto y concluimos que esto se llama violencia política de género, hacia la mujer, por mi preferencia sexual y homofobia; violencia porque no les gusta que gobierne MORENA. Lo que está pasando parece una película de terror que había escuchado de otras personas, pero en efecto, hay una persecución por parte del gobernador y del Fiscal hacia mi persona”, establece.
Beristain admite que Solidaridad tiene problemas complejos como la Pandemia por COVID19 o el combate del sargazo, que afectan la economía local, entre otros, aunque con ella al frente del gobierno local, asegura, han podido frenar la violencia del municipio y establecer mejoras de la mano del gobierno federal, con una inversión de 600 millones de pesos por parte de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (SEDATU) en espacios públicos, la construcción del Tren Maya, oficina de atención por parte de Relaciones Exteriores . Además, añade, han instrumentado una serie de acciones a favor de los habitantes en materia de salud, transporte, seguridad, apoyo a las mujeres y la comunidad de la diversidad, entre otras.
“Hay un cerco de información en la que se han minimizado mis aciertos y maximizado los problemas, pero tengo el honor de haber sido siempre electa por mayoría: fui regidora, diputada local, hoy alcalde. En recientes días llegan expedientes de todos mis secretarios, mensajes, visitas de la policía, entre otros actos de intimidación”, sostuvo.
Ante ello, el gobierno federal recomendó a la alcaldesa acudir por apoyo a la Secretaría de Gobernación con una nota de recomendaciones y metodologías para la protección por la violencia de género, por lo que sostiene reuniones periódicas con su titular, Olga Sánchez Cordero, así como la secretaria de Seguridad Pública federal, Rosa Icela Rodríguez
“También tengo todo el apoyo también del equipo del Comité Nacional de Morena, de Mario Delgado y Citlali Hernández, quienes también han sido denunciados por el gobierno local por su apoyo a mi persona”, expone.
Laura Beristain Navarrete establece que ha ingresado 30 acciones legales para invalidar la elección y por el acoso que la afecta, por lo que llevará la batalla jurídica hasta sus últimas consecuencias. “Lo más importante es visibilizar que éste es un problema de género y si yo, siendo alcaldesa, paso por todo esto, alguien que no tiene los medios puede hasta desaparecer. El Presidente (Andrés Manuel) dice que los caciques viven hasta que la sociedad lo permite y yo tengo el respaldo de la gente, que me conoce desde hace más de 35 años, porque he sido de camarista, mesera, vendía tortas; me conocen y los ciudadanos tienen cercanía conmigo, porque ahí vivo, ahí camino y esta violencia debe parar”, concluye.