Historias Surrealistas
La grilla electoral que viene
Si usted estaba con el pendiente de cómo nos vamos a entretener ahora que termine el show de luz y sonido de Tenochtilandia, pues prepárese porque viene otra etapa de grilla, mucha grilla, harta grilla política.
Porque aparte de la versión 12 de los mini informes presidenciales que tendremos el 1 de septiembre, si no hemos perdido la cuenta pues hubo uno a los 100 días, otros cada trimestre y los tradicionales de cada año, en septiembre inician los preparativos para las elecciones de 2022 en otros seis estados del país.
Los partidos todavía no se reponen de las elecciones 2021 y ya velan armas para las siguientes, y aunque hay quienes cantan victoria por anticipado, todavía no hay nada para nadie.
La realidad es que si bien el partido en el gobierno ganó 10 de 15 gubernaturas, Morena y sus aliados perdieron algo así como 10 millones de votos y eso los llevó a perder la mayoría absoluta en el Congreso federal.
Morena y sus aliados perdieron algo así como 10 millones de votos, situación que hace harto complicada sus expectativas para 2024.
Pero vamos por partes. La renovación de las gubernaturas en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas tiene muchos asegunes, veremos por qué.
Hidalgo y Oaxaca son dos de las últimas gubernaturas que conserva el PRI cuya peculiaridad es que nunca han experimentado la derrota. Junto con el Estado de México son los últimos bastiones tricolores.
También están en disputa cuatro gubernaturas bajo el sello del PAN (una en alianza con el PRD), pero es Tamaulipas el objetivo estratégico de la 4T y han hecho todo para hacerse de este territorio. Mientras que Quintana Roo los morenistas dan por hecho que es suya.
Los electores tendrán la última palabra, pero lo que esperamos que no se repita es el contexto de polarización y violencia ensombrecieron 2021, pues pintaron de rojo las elecciones. El balance es de un centenar de asesinatos contra opositores a los gobiernos estatales y municipales, además de unas 700 agresiones contra políticos y candidatos.
Veremos en escena además de los senadores que son casi candidatos naturales a las gubernaturas, o sienten serlo, a ex militantes del PRI, un ex dirigente nacional del PAN (Manuel Espino) y a sobrevivientes del PRD, cambiando de cachucha y camiseta partidista.
Eso sin contar con el hijo de un exgobernador priista hasta la médula de los huesos, Heladio Ramírez López, y hoy alto funcionario de una dependencia del sector salud, reclamando su herencia política por Morena, nos referimos a Luis Antonio Ramírez Pineda, director del ISSSTE.
Llama mucho la atención el juego de las encuestadoras, la mayoría de las cuales parece que se entretienen en una suerte de adivinación, nada más cheque usted el ranking de aceptación de los gobernadores muchos de los cuales están bien calificados pero a la hora de las elecciones pierden, todo un misterio sin resolver.
Así viene la cosa
En Aguascalientes no se ve oposición fuerte como para hacer caer al PAN, pero dicen los que saben que como sea los panistas se pelean hasta con su propia sombra.
Las listas de tiradores son largas, todos quieren. Destaca entre los hidrocálidos Antonio Martín del Campo como el más fuerte, pero también llama la atención que después del góber Martín Orozco paree que tendrán que pedirle el visto bueno a la influyente doña Teresa Jiménez. En Morena espera la señal divina es el súper delegado Aldo Ruiz.
En Durango tampoco se ve una fuerte oposición pues los tiradores de Morena también se pelean entre ellos mismos y de vulgares ambiciosos no se bajan. El ex dirigente panista Manuel Espino está esperando por si es chicle y pega.
En Hidalgo, Omar Fayad no siente lo duro sino lo tupido de las presiones. LO que parece broma es que ya anda merodeando el cantante Francisco Xavier Berganza, reconocido como el maestro del trapecio político, quiere ser otra candidato pero por Morena.
De los priistas destacan Israel Félix Soto, el más cercano a Fayad, Carolina Viggiano, Nubia Mayorga y David Penchyna.
Xóchitl Gálvez ya se destapó para competir por la gubernatura chilanga para 2024.
Algo debe tener el oficio de la cantada pues doña Susana Harp, la hija del ex dueño de Banamex, también le apuesta a ser candidata a la gubernatura pero en Oaxaca, aunque tendrá que rebasar por la izquierda a muchos tiradores que ya se sienten comiendo chapulines en el palacio de gobierno.
Para Tamaulipas ya se sabe que comenzaron con el desafuero de Francisco García Cabeza de Vaca, estrategia que les sirvió a Morena para echarse a la bolsa las principales alcaldías y la mayoría en el Congreso local. Para el 2022 el candidato del PAN tendrá que estar súper blindado para remontar esta elección que aseguran será de Estado.
Tenemos tela de dónde cortar para entretenernos en la tenebra política.
Columnómetro de Aquiles Baeza.
1.- Alianza opositora enseña el músculo.
Por lo visto, senadores y diputados de Morena en la actual legislatura se van a quedar con las ganas de ir a un periodo extra de sesiones para analizar la propuesta de Ricardo Monreal de Ley Reglamentaria para la Revocación de mandato, pues no les alcanzaron los votos para hacerlo.
La alianza opositora en el Congreso comenzó a mostrar de qué son capaces y de aprobarse el tema de la Revocación no hay certeza de que ese plebiscito se realice el 21 de marzo como lo quiere AMLO.
A la actual legislatura le quedan dos semanas para que termine.
2.- La tercera ola de Covid está imparable… y la señora Sheinbaum haciendo pachangas en el Zócalo.
3.- ¿Qué hacen los emprendedores para controlar el estrés y la incertidumbre? Genaro Mejía en La última y nos vamos nos platica de esto y más en el Newsletter de LinkedIn.
__Quien diga que la pandemia no lo afectó, miente. Quien diga que los líderes siempre tienen todas las respuestas, miente. Quien diga que los emprendedores nunca tienen miedo y nunca se desesperan, miente. Esta semana en Bar Emprende, Genaro conversa con el chef Maycoll Calderón, quien tuvo casi que parar por completo la operación de tres restaurantes y un bar, sin despedir a nadie, sin desesperarse, sin perder la cabeza.