Juego de ojos/Miguel Ángel Sánchez de Armas
Pandemia; desempleo; pobreza; corrupción. A mitad del camino nada que celebrar.
La circunstancia de crisis seguramente es muy similar a la de México en la mayor parte del mundo.
Pero hay países que ven la recuperación de la grave circunstancia de precariedad y riesgo de presente de la Pandemia que envuelve al mundo sin la infame actitud de caracterizar con mentiras el discurso del oficialismo que trata de ocultar que en nuestra nación la crisis es mucho más grave que en otras.
El solo cambio de titular en la Secretaría de Gobernación no significa nada ante la magnitud del desastre.
A tres años de gobierno del presidente que proclamó que su ejercicio al frente del Ejecutivo Federal sería para México una Cuarta Transformación, la bandera fundamental del cambio prometido, o sea el fin de la corrupción, no se ha logrado en muchas áreas del actual régimen.
El discurso inicial de la Cuarta Transformación fue duramente condenatorio para el pasado.
Pero ya los calificativos de “enemigos del pasado”; de neoliberales y demás sambenitos que han adjudicado a quienes no demuestran obsecuencia, sumisión o complicidad con el gobierno en turno, se desgastaron tantos que no impactan ni al más ingenuo o despistado observador de la crítica realidad nacional que padecemos.
Se llega a la mitad del camino con pendientes muy graves en materia de salud, de emergencia económica, de urgente necesidad de generación de empleos, de castigo ejemplar a los corruptos que son militantes activos de la llamada 4T.
Los mexicanos ya no podemos aceptar la incongruencia del discurso oficial: proclamar una cosa en el discurso y realizar actos que la contradicen en los hechos.
Tres años de gobierno de la 4T y nada que celebrar.
Tal vez esa circunstancia de desencanto de la sociedad con el gobierno sea la razón de que estemos viviendo una eta intensa de una sucesión presidencial adelantada.
La revocación de Mandato tiene un desenlace previsible: AMLO será aprobado para que termine su sexenio.
Pero ello significará cada vez menos que su estilo personal de gobernar sea el factor que lleve a esa aprobación. El presidente tiene tres años por delante para dar un giro de timón que rectifique el rumbo de su gobierno.
El país está a la espera.
En tiempo real
1.- El Salario rosa es un programa que permite sacar adelante a las familias mexiquenses, además de reconocer el esfuerzo que realizan las amas de casa, señaló el Gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza, y agregó que este apoyo llega directamente a las manos de las mujeres, quienes lo invierten siempre pensando en el bienestar de sus familias.
“Por eso nació este programa del Salario rosa, para reconocer y apoyar a las amas de casa, porque sabemos el gran esfuerzo que hacen para sacar a la familia adelante, porque sabemos, además, que para ustedes lo más importante es apoyar a la familia, y porque sabemos que el Salario rosa está en las mejores manos, porque está en las manos de ustedes, de las mujeres, de las amas de casa, porque ustedes cuando les llega un apoyo, algún ingreso, siempre lo invierten pensando en la familia”, refirió.
2.- Las propuestas del PRD a la Alianza con el PAN y el PRI para la selección de candidatos a gobernador que competirán en las elecciones para gobernador el próximo año, se basarán en auscultaciones profundas de la problemática de cada entidad. Jesús Zambrano, líder nacional del PRD, presentará próximamente una propuesta ya en forma de posicionamiento.
3.- La Fiscalía General de la República y la Carabina de Ambrosio. Reveladora información de Animal Político:
“En los últimos diez años la Fiscalía General de la República (FGR) ha atraído las investigaciones de poco más de 300 casos por hechos delictivos que ocurrieron en los estados. Esto con el objetivo de atender con más fuerza y capacidad ilícitos que, por su naturaleza o complejidad, requerían de la intervención de los agentes federales. Sin embargo, la mayor parte de esos casos no se ha resuelto.
“Datos oficiales que Animal Político obtuvo a través de una solicitud de transparencia muestran que entre 2011 y 2021 menos del 5 por ciento de los casos que atraídos por la FGR culminaron con una sentencia condenatoria. Tres de cada cuatro casos ni siquiera han llegado a manos de los jueces”.
¡Tómala¡