Ni paraíso ni delincuencia desbordada/Salvador Guerrero Chiprés

@guerrerochipres

La Ciudad de México ocupa hoy un lugar destacado por la reducción de más de un tercio en homicidios dolosos, por ejemplo, en contraste con otras entidades del país donde la pandemia no fue una variable para contener la violencia mortal.

El comportamiento de este delito durante la gestión de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, es parte de un balance más amplio y positivo que coloca a los ilícitos de alto impacto con una disminución de 41%, entre 2019 y octubre de 2021. 

Estos indicadores son resultado de políticas públicas coordinadas y dirigidas a construir una ciudad segura, y contribución directa de la denuncia. 

El avance fue presentado y reconocido públicamente en la conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien gobernó la CDMX eficazmente, a juzgar por la mejora en datos y percepción y por los resultados electorales del 2006. Durante su administración el delito de homicidio doloso descendió significativamente a 1.8 por día cuando estaba en 5 en mayo de 2019.

Interrumpir esa tendencia, representó un reto que requería una estrategia dirigida y una coordinación plena, no articulada anteriormente. 

El descenso logrado es de 52% a noviembre de este año, es decir de 5 pasó a 2.5 homicidios dolosos por día. El respeto a la vida y condiciones de seguridad, son de las acciones de mayor impacto en la vida diaria de los ciudadanos.

En el reposicionamiento en el combate al delito, la CDMX ocupa el lugar 22 en la tasa de homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes.

Lograr estos resultados, según el Presidente López Obrador, es resultado de la perseverancia —cualidad que la Jefa de Gobierno comparte con el mandatario—, el trabajo coordinado, la acción territorial y el combate a la corrupción e impunidad. Los ciudadanos capitalinos han mejorado la percepción de seguridad, pero es inevitable reconocer que aun falta mucho trabajo para mejoras más contundentes en la manera como percibimos la seguridad.

Esa colaboración interinstitucional se manifiesta además en la presencia creciente de la Guardia Nacional en labores de seguridad pública en las alcaldías, como un apoyo que permite explotar el potencial de sus elementos en cuanto a experiencia, formación y disciplina, especialmente donde existen delitos como narcomenudeo o disputas entre organismos delictivos.

La reducción de asesinatos vinculados en muchos casos a la violencia ejercida por grupos delictivos en disputa por territorios, demandará la coordinación efectiva con alcaldes y alcaldesas, para reducir riesgo para los ciudadanos en un esfuerzo que debe localizarse por encima de las prioridades militantes de cada organismo político.

La Ciudad de México tal vez no sea un paraíso de seguridad, como lo dijo el mandatario nacional, pero ya no es el sitio donde da miedo vivir, como ocurría hace unos 20 años. 

Hoy la capital de la nación es una urbe más habitable y segura, donde la violencia no se ha erradicado, pero hay camino y expectativa fundada de mejora.

Salvador Guerrero Chiprés es Presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México