Vinculan a proceso a policía acusado de matar a su pareja en Guerrero
CIUDAD DE MÉXICO, 17 de agosto de 2022.- El vocero de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Ulises Lara López, informó que “asestamos un fuerte golpe a probables extorsionadores”, cuando detectives de la Policía de Investigación (PDI) y personal ministerial cumplimentaron órdenes de cateo en inmuebles que funcionaban como call center: en la colonia Actipan y Narvarte Poniente, alcaldía Benito Juárez, así como en las colonias San Rafael, Juárez y Santa María la Ribera, alcaldía Cuauhtémoc.
En mensaje a medios, añadió que detectives de la PDI, con personal de la Coordinación General de Investigación Forense y Servicios Periciales, y Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) se constituyeron en dichos inmuebles para inspeccionarlos.
“De manera preliminar, les puedo adelantar que las autoridades encontraron personas que posiblemente laboraban en el lugar, específicamente en los pisos 8, 9 y 10 de uno de los referidos inmueble, así como más de tres centenares de teléfonos celulares, casi mil microtarjetas o chips para dichos dispositivos, así como computadoras portátiles y un pasaporte.
“En el piso 8 fueron localizados individuos, encabezados por posibles líderes; en el piso 9 estaban más personas, quienes posiblemente hacían las funciones de asistencia administrativa en Recursos Humanos y de Dirección, y en el siguiente nivel, décimo, encontramos a sujetos con siete posibles líderes al frente.
“De ese grupo, 19 individuos, entre ellos dos mujeres extranjeras, fueron detenidos y puestos a disposición del Agente del Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación Estratégica Central de la Coordinación General de Investigación Estratégica, por su probable participación en la comisión del delito de cobranza ilegitima”, detalló.
Aunque minutos más tarde, la FGJCDMX informó que hacia las 20 horas, el número de detenidos por los cateos realizados en cinco inmuebles (uno de ellos en dos pisos diferentes) asciende a 27 personas.
Y señaló que a través de aplicaciones ofrecían préstamos, después, de forma amenazante y poniendo en riesgo la seguridad de las personas, exigían réditos impagables y fuera de toda norma.