Morenistas, enterradores de democracia: Noemí Luna
CIUDAD DE MÉXICO. 22 de agosto de 2022.- El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador consideró que la desaparición de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa se encuentra debidamente explicada tras el informe que presentó la comisión para la verdad, además se cuenta con una lista de los implicados en los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014.
El mandatario hizo alusión a que el informe también detalla “la actitud de las autoridades, y de cómo los que no habían participado, con los que habían participado de alguna u otra forma se pusieron de acuerdo para ocultar los hechos, que es lo que se conoce como la fabricación de la llamada verdad histórica”.
Durante la conferencia de prensa mañanera, López Obrador insistió que el Informe de la Presidencia de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa indica quienes son los responsables de haber difundido una versión de los hechos que no corresponde con lo que sucedió en Iguala la noche del 26 de septiembre y las horas posteriores.
Al referirse a la detención del ex procurador Jesús Murillo Karam, López Obrador señaló que, independientemente de declaraciones de los implicados, él mismo se inculpó al declarar en 2014 que fue él quien preparó y encabezó junto con el jefe de seguridad (Tomás Zerón) al equipo que se encargó de la investigación y él mismo se ostentó como responsable directo de la indagatoria.
En la conferencia, se exhibió el video de la sesión del 18 de agosto pasado en que aparece el fiscal Alejandro Gertz Manero en la reunión con los padres de los estudiantes, en la cual él asegura “que con pruebas judicializadas, se ha podido demostrar que el propósito de quienes habían asumido tal compromiso, era el de engañar a la población para cubrir lo ocurrido y eludir la responsabilidad de autoridades locales y federales coludidas, adjudicando la brutalidad ocurrida solo a policías locales de Iguala, Cocula y Huitzuco, quienes entregaron a los estudiantes masacrados a uno de los cárteles que disputaban el control de las drogas en esa ciudad”
“Para lograr lo anterior, los que se hicieron responsables de esa investigación, cometieron un número incalculable de abusos, torturas y presiones para obtener la confesiones de dichos policías adjudicándoles todas las responsabilidades que sus superiores estaban buscando eludir para después inventar la supuesta verdad histórica que señalaba que todos los estudiantes habían sido incinerados en el basurero de Cocula para así concluir el caso y cerrarlo definitivamente”, refirió Gertz Manero en esa declaración.