Benjamín Walker inicia etapa y álbum en casa de Chavela, pero sin mezcal

CIUDAD DE MÉXICO, 19 de noviembre de 2022.- Cariño externa Benjamín Walker por el inicio de una nueva etapa con el lanzamiento de Te Quiero (Alicia), primer single de su siguiente disco y cuyo video fue filmado en película de 16 milímetros en la casa de Tepoztlán de Chavela Vargas (1919-2012), a quien le pidió permiso para gozar la música como lo hacía ella, pero sin botella en mano.

Sí, me faltó llevar un mezcal para brindarle, creo que debí hacerlo (casi riendo), tengo mi mezcalito pendiente con Chavela y nos pasó algo muy chistoso durante la jornada de rodaje: la energía se fue cuatro veces y los chicos iban a ver si es que se habían bajado los tapones (las pastillas) y estaban bien.

Pero el enchufe principal, donde estaban conectados todos los equipos, estaba desconectado y pasó cuatro veces; nadie sabe hasta el día de hoy cómo o quién lo desenchufó; entonces, ahí la dejo”, rememora el chileno, vía Zoom, rematando con un ‘no sé’, mostrando las palmas de sus manos a la altura de su cabeza.

Suspira que Te Quiero (Alicia) encarna muchas cosas que caracterizan una nueva etapa, es la primera canción que escribió cuando llegó a residir a CDMX, en agosto de 2021, mientras vivió en La Roma, un par de meses, hasta salir corriendo por la gentrificación y el precio de la renta.

Visiblemente emocionado, vistiendo camiseta negra, sencilla y usando audífonos para escuchar la charla, rememora que empezó a tararear la canción en la calle, se encontró con la palabra Alicia en muchos lugares: en el nombre de una tienda de abarrotes, le sonó una melodía que la tenía en su letra y conoció a una persona llamada así.

Quería hablar desde hace mucho en el estado de éxtasis y fantasía que uno vive después de un encuentro puntual amoroso y se me presentó mi personaje, Alicia y lo grabe este año: una canción que nació, se produjo, se cultivó en esta ciudad y tuvo un broche de oro: grabar el video oficial en la casa de la mismísima Chavela Vargas.

Y también canto distinto en ella. Siempre escribo desde la guitarra canciones muy intimas, de voz muy tenue, muy pequeñitas y esta me dio el permiso de cantar fuerte, de pecho, de gritar, de descubrir una voz distinta en mí, entonces, el cambio de etapa es bastante literal”, saca de su interior, sobre el personaje que encontró e inventó y en griego significa verdad.

Sube de bajón

Además, luego de un periodo de baja autoestima, mucho bajón, por varias razones, postpandemia y su disco Libro Abierto obstaculizado en su proceso por el Covid, Te Quiero (Alicia) le devolvió confianza, ánimo y goce de seguir componiendo, de hablar de lo que le pasa y no dejar de entender la canción como el mecanismo para hablar de su experiencia, sentimientos y materializarlo: hacer de los temas sus propias terapias.

Creo que este disco que viene estará dotado, sin quererle poner esa responsabilidad, pero por lo que me pasa ahora, de procesos personales y eso me tiene muy contento”, adelanta Benjamín, sobre la grabación que visualiza para 2023, por lo que por ahora tiene pocos shows, precisamente para darse tiempo de componer.

También revela que siempre ha entendido los álbumes como un proceso global, como un pie forzado en el que tiene ese eje central del que guiarse para escribir el resto y lo que menos ha hecho, es preocuparse de canción por canción y es algo que quiere experimentar ahora, en la composición y el estudio, en lugar de pensar en muchas melodías en un solo viaje.

Mayor atención en Chile

Y ya casi a un año del lanzamiento del álbum Libro Abierto, Walker provoca mayor interés en su país que antes de vivir en México y dos conciertos de peso lo ejemplifican: en enero abrirá a Jack Johnson y marzo pisará el Lollapalooza.

En Chile así ocurre, como en todos los países, que cuando a uno lo ven haciendo cosas en el extranjero, logrando cosas, sí hay una mayor atención, porque uno representa la industria de la música chilena fuera y se le da un valor agregado a eso.

Pero también me atrevo a decir que mi presencia en el Lola o Jack, tiene que ver con un trayecto, un camino que ha sido paciente, orgánico, sin apuros, sin forzar procesos, con una audiencia que ha crecido de boca en boca y terminó por instalarme en esos espacios como un poco de consagración”, explica.