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SANTA GERTRUDIS, Chih., 14 de junio de 2023.- Bajo fuego real, efectivos de la Guardia Nacional (GN) responden al ataque a un cuartel militar, detienen en medio de una población a presuntos delincuentes, evacuan heridos y restablecen la seguridad tras ser atacados por criminales que usan vehículos de blindaje artesanal; todo en menos de 45 minutos.
Se trata de un intenso ejercicio final en seguridad pública de su formación como Fuerza Especial de Reacción e Intervención (FERI) de la GN; preparación que reciben de personal especializado de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en el Centro Nacional de Adiestramiento (CNA) del Campo Militar 42, en Santa Gertrudis, Chihuahua.
Bajo un clima extremo, mil 200 integrantes del equipo de élite de la Guardia, con el apoyo de militares, realizan distintos operativos para neutralizar a un grupo criminal que emplea armas de grueso calibre para atacar una base militar recreada en una de las 60 mil hectáreas del Centro Nacional de Adiestramiento.
Para hacer más realistas las condiciones a las que se enfrentan las Fuerzas federales, el CNA cuenta con instalaciones que asemejan a un poblado rural similar a los que se ubican en las zonas calentanas, serranas o desérticas de México.
Entre calles sin pavimentar, casas de adoquín, canchas improvisadas de futbol, un mercado, un plaza central, un quiosco, una iglesia y bajo la presencia de decenas de pobladores –algunos cumpliendo funciones de halconeo al servicio del crimen– una columna de camionetas de la GN ingresa a la ficticia comunidad para detener a un delincuente al interior de un domicilio y casi de forma simultánea se abren paso para ejecutar una orden de aprehensión contra un segundo criminal a quien suben a un helicóptero para ser llevado ante autoridades judiciales.
Ambos despliegues, según el ejercicio, se logran sin realizar un solo disparo debido a la precisión para ejecutar lo que marca el mando, la coordinación y el trabajo de inteligencia para ubicar a los objetivos.
Sin embargo, para demostrar el control que ejercen en el poblado, células criminales irrumpen en las calles a bordo de camionetas con armas largas y arremeten contra la columna de las unidades de la Guardia usando los camiones denominados monstruos, por el blindaje artesanal del que están hechos.
La refriega impide que helicópteros de la GN puedan descender para sustraer al personal herido, por lo cual los agentes federales ejecutan maniobras desde el aire y descienden una camilla por medio de cuerdas. Mientras, en tierra, los efectivos forman un perímetro para proteger a las aeronaves.
Debido al inminente riesgo, los agentes federales repelen la agresión accionando sus armas de fuego y por aire son apoyados por helicópteros Blackhawk hasta que logran detener la embestida de criminales, incluso debido al uso de artillería real los camiones monstruo son consumidos por las llamas.
El ejercicio es la culminación de la formación mil 773 efectivos de la Guardia Nacional instruidos en la quinta y cuarta fase de adiestramiento impartido por la Secretaría de la Defensa Nacional.
Desde 2022, la Guardia recibe adiestramiento en el campo militar ubicado en Santa Gertrudis, Chihuahua, como parte de su formación para la atención en seguridad pública y operativos conjuntos de seguridad interior.
El general comandante CNA, Isaac Bravo López, subraya que las rutinas de adiestramiento están basadas en la doctrina que considera que el armamento, puesto bajo la responsabilidad de los agentes de la GN y militares, es para defender a los mexicanos y debe ser empleado de forma gradual y progresiva para contrarrestar los efectos de las armas de la delincuencia organizada.
También en el Centro Nacional de Adiestramiento militares e integrantes de la Fuerza Aérea realizaron un simulacro en seguridad nacional en cual responden a una invasión armada en territorio nacional, ejecutada por 20 paracaidistas que se lanzan a 18 mil pies de altura para apoderarse de una instalación estratégica que intentan poner bajo control de grupos subversivos.
Por tratarse de una situación vulnera la seguridad nacional, son los militares quienes se encargan de romper el cerco impuesto por los invasores.
Los soldados responden con fusiles, infantería, vehículos tácticos y helicópteros artillados hasta replegar al grupo subversivo fuera de territorio nacional y devolver el control de la seguridad a la Guardia Nacional.
Los agentes de la Guardia y militares que realizaron los operativos forman parte del agrupamiento 2023 de la Fuerza de Tarea Villa, integrando por un cuartel general y cinco componentes; Terrestre, Aéreo, Guardia Nacional, Operaciones Especiales y Logístico, formado por cuatro mil 30 militares, mil 773 guardias y 256 de la Fuerza Aérea: en total seis mil 59 efectivos.