Eliminar autónomos, un autoengaño/Bryan LeBarón
*** Desafíos en la Gestión Portuaria
El Sistema Portuario Nacional, fundamental para la integración del comercio internacional en México, se enfrenta a grandes desafíos que van más allá de las aguas que lo rodean.
Recientemente, diversas esferas gubernamentales estatales y entidades paraestatales demostraron un creciente interés en la gestión de puertos federales estratégicos en ambos litorales del país. Esta tendencia ha captado la atención de analistas, puesto que plantea interrogantes sobre la estructura legal y la eficiencia logística que caracterizan a este sistema desde su establecimiento en 1993.
Un claro ejemplo de ello es el puerto de Progreso, Yucatán, donde el gobernador Mauricio Vila Dosal obtuvo la aprobación del Congreso del Estado para comprometer una inversión que supera los 3 mil millones de pesos provenientes de recursos fiscales.
De acuerdo con información proporcionada por el líder estatal, estos fondos están destinados a financiar operaciones de dragado, relleno, y construcción de una plataforma con el objetivo de ampliar la capacidad portuaria. Además, se incluyen proyectos complementarios y la adquisición de equipamiento necesario para el desarrollo de estas mejoras.
No obstante, la preocupación continúa en aumento y radica en la decisión del gobierno estatal de buscar una adjudicación directa por parte del gobierno federal para la gestión y operación de esta expansión, lo que implica una transferencia de competencias que entra en conflicto con la actual Ley de Puertos.
Desde el inicio de este sexenio, el Sistema Portuario Nacional se encuentra bajo la supervisión de la Secretaría de Marina, liderada por el almirante José Rafael Ojeda Durán, y está sujeto a las disposiciones de esta ley. Bajo este marco normativo, la administración portuaria es en gran medida de competencia federal, mientras que las autoridades estatales reservan su intervención en la gestión de puertos donde no existen instalaciones federales.
Esta normativa tiene como objetivo garantizar una planificación y ordenamiento coherente, elementos cruciales para fomentar la competitividad y estimular el desarrollo económico de la nación.
Sin embargo, la intervención directa del gobierno estatal en la administración de puertos federales, sin seguir los procedimientos legales debidos, podría desdibujar los límites tanto operativos como legales que actualmente se encuentran claramente definidos.
Este aspecto es de suma relevancia, debido a que uno de los pilares fundamentales de la Ley de Puertos reside en la transparencia en el proceso de otorgamiento de concesiones y cesiones, a través de concursos públicos.
La aspiración de Yucatán de obtener una adjudicación directa pone en entredicho la legalidad y la sana competencia económica, lo que podría tener un efecto potencialmente perjudicial, al socavar la seguridad jurídica tanto de los inversionistas como de las propias administraciones portuarias federales.
Se dice que esta tendencia está empezando a replicarse en otros puertos como Tampico, Altamira, Veracruz y Manzanillo, lo que podría augurar un debilitamiento del robusto sistema portuario nacional que conocemos hasta ahora.
Desde 1993, fecha en que entró en vigor la ley actual, el sistema portuario mexicano logró atraer la inversión de actores privados, quienes en la actualidad representan más del 80% de la inversión total en puertos, según datos del Instituto Mexicano del Transporte, presidido por Alberto Mendoza Díaz.
La participación de estos actores trajo como resultado una modernización notoria en la infraestructura y el equipamiento portuario, lo que elevó el desempeño operativo de estas instalaciones a niveles comparables con los estándares internacionales. En algunos casos, como en la gestión de contenedores, se lograron niveles de eficiencia que rivalizan con las terminales de países altamente desarrollados.
Asimismo, de acuerdo con estadísticas presentadas por la SEMAR este año, el periodo de enero a agosto de 2023 refleja una evolución mixta en el comercio portuario. Las cifras muestran un incremento del 2.5% en la carga importada, que alcanzó un total de 85,945,852 toneladas, lo que juega un papel esencial en el comercio internacional. Por otro lado, las exportaciones experimentaron una disminución del -6.6% en comparación con el año anterior, situando la carga exportada en 70,655,733 toneladas.
Esta incursión de intereses estatales en la administración portuaria, que carece del marco legal y la visión estratégica que predomina hasta ahora, podría sembrar la semilla de la incertidumbre en un sector que representa el pilar fundamental de la economía mexicana. A medida que se avecinan nuevos retos y oportunidades en el horizonte, la preservación de la transparencia, la legalidad y la eficiencia operativa en nuestros puertos se convierte en un imperativo ineludible para asegurar la sostenibilidad de la competitividad de México en el complejo escenario comercial global.
*** PEMEX y sus equipos
Una de las muchas acciones que se han realizado para llevar a cabo el rescate de Petróleos Mexicanos (PEMEX), de Octavio Romero Oropeza, es la reducción en la renta de equipos e infraestructura, lo que en muchos casos les ahorró cerca del 50% de los recursos destinados.
Y es que, en el tema de las plataformas petroleras, en esta administración la empresa productiva del Estado ha edificado 26 y ha adquirido algunas de las que en el pasado rentaban, tal es el caso de la Kukulkan que se encuentra en el litoral de Tabasco y que fue adquirida hace cerca de ocho años, pero que en un principio se arrendaba por 110 mil dólares diarios.
Pero la actual administración decidió pagarla a través de un arrendamiento financiero que cuesta cerca de 58 mil dólares diarios, esto es el 52% de lo que se pagaba en un inicio sólo por la renta. De acuerdo con el directivo, este es un buen ejemplo de por qué PEMEX ha apostado por el desarrollo y la adquisición de sus propios equipos.
*** WOOW marca el camino
TOME NOTA *** En el paisaje cambiante de la industria de seguros, la rapidez se vuelve crucial, y aquí es donde WOOW, bajo la dirección de Margarita Zepeda Porraz, destaca.
Esta plataforma mexicana de seguros en línea ha logrado reducir el tiempo de contratación a un promedio de tres minutos, un hito significativo que subraya su estrategia de integración de tecnología y que podría agilizarse ahora que comienzan a adoptar Inteligencia Artificial. La unión de esta tecnología promete una transformación profunda, donde las cotizaciones en tiempo real y las pólizas personalizadas se convierten en la norma.
Tal futuro fue resaltado la semana pasada en eventos globales como el INBOUND de Boston y el IBM TechXchange de Las Vegas, y ya es moldeado por actores como WOOW, al demostrar que el sector asegurador mexicano está bien posicionado en la vanguardia tecnológica.