Transparencia, el reto de la transición al Inegi y la reforma necesaria
CIUDAD DE MEXICO, 17 de octubre del 2023.- La búsqueda de la paz, la democracia y los derechos seguirá ocupando un lugar destacado en la labor de la Central Sindical Internacional (CSI).
Para lograrlo, se necesita una rápida aceleración de los todavía lentos avances en lo que respecta a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
Esto contribuirá a sentar los cimientos de la paz y a ofrecer a los trabajadores un nuevo contrato social, señaló Luc Triangle, secretario general de la Central Sindical Internacional
Dijo que hoy es el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, 17 de octubre, y ofrece otra plataforma para reforzar la demanda de protección social universal, la consecución del pleno empleo como objetivo político central y la formalización del trabajo informal.
Añadió que este mes estarán muy ocupados con los preparativos del Consejo General de la CSI de diciembre, donde informaremos sobre nuestros logros de este año, nuestros planes para 2024 y nuestros progresos en la búsqueda de una opinión consultiva por parte del Tribunal Internacional de Justicia sobre la protección del derecho de huelga en los Convenios de la OIT.
También debatirán el seguimiento de la Comisión de Encuesta de la OIT sobre Belarús, con un procedimiento contemplado en el artículo 33 de la Constitución de la OIT.
Tras el éxito de la campaña de la CSI y sus socios de sindicatos mundiales, el 29 de octubre se celebrará en todo el mundo el Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo de las Naciones Unidas.
«Reclamaremos inversión en cuidados y trabajo decente para los casi 400 millones de cuidadoras y cuidadores que hay en el mundo, dos tercios de los cuales son mujeres», dijo.
Dado que las mujeres desempeñan tres cuartas partes de todo el trabajo de cuidados no remunerado, urgió que exista un reparto más equitativo del trabajo de cuidados entre hombres y mujeres.
Y el 24 de octubre, Día de las Naciones Unidas, se recordará la labor vital de la ONU.
Tras los feroces ataques de Hamás contra Israel, y sus brutales secuelas, que suponen una nueva escalada de conflictos en el mundo, todos los países deben aceptar el papel crucial que desempeña la ONU para evitar y resolver conflictos y garantizar el respeto del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos.