Libros de ayer y hoy/Teresa Gil

Horas de coraje y búsqueda desesperada ante el TEPJF

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Mientras el mundo se muestra asombrado, los medios mas importantes de países señalan la referencia, la información y los más altos líderes de gobiernos llaman y ponen sus ojos en México, la pequeñez opositora deshebra su coraje. Portales como el de Carmen Aristegui dan voz a los heridos que remarcan esas heridas, pero no profundizan en  las causas. Los que esperaban grandes resultados en esta contienda ¿tenían esperanzas por algo extraordinario que hicieron? ¿se preocuparon por el pueblo en este contexto? ¿aprovecharon las muchas ofertas de avance que hizo el actual gobierno, para apoyar?  Pese a que eran opositores ¿tuvieron la calidad moral para reconocer que muchos programas eran fabulosos? , ¿no hubo en su soberbia la reflexión de apoyar iniciativas que daban un mejor espacio a la gente de nuestro país? ¿escondieron su disgusto para reconocer lo mejor de esta 4T que odian, pero que está tratando de mejorar al pueblo? Si fueron justos  pese a las diferencias y apoyaron en lo que pudieron, deben de estar sorprendidos. Pero si ellos saben que no hicieron nada para ayudar al pueblo, no tienen derecho a quejarse y a protestar. No merecían nada de ese pueblo.

PREGUNTAS PARA LOS QUE CREEN QUE MERECÍAN ALGO EN ESTA CONTIENDA

Después de las interrogantes anteriores, es tan ilógica la posición de los desencantados, que ahora hablan de una elección extraña, porque Morena arrasó en el país. Su cerrada inteligencia  no les permite pensar que ellos fallaron. Tanto defender al INE y ahora lo  atacan con sus dudas sin recordar que está dividido a favor de ellos y que si se hubiera hecho un fraude éste sería a su favor. La historia nos presenta las noches tristes de las derrotas, pero también la furia del derrotado que no se resigna o la reflexión del que entendió los golpes y los toma como una advertencia, un castigo o una esperanza para  cambiar. En general, algunos perdedores anidan la soberbia por un golpe que consideran no  merecido o la desconfianza en creer que hubo fraude o truco en las decisiones. De todo hay. No parece  por lo que se ha expresado que haya la humildad del reconocimiento o la profundidad de la reflexión. He leído columnas o expresiones en redes, en  donde los desencantados, fuera de sí, redoblan sus insultos y exigen  un nuevo conteo. Otros tienen trabajando a sus técnicos para demostrar que fueron objeto de una maniobra. La certeza de que perdieron no la pueden creer.

LA BÚSQUEDA DE RESQUEBRAJAR, LLEVA LOS PASOS OPOSITORES AL TEPJF

Desalentados ante el desastre, los opositores solo piensan en la venganza. Se habla que ya están acudiendo a los secuaces que tienen en el Tribunal Electoral de Poder Judicial de la Federación, el entorno de ese órgano que fuera de toda lógica, se inserta desde hace tiempo en ese poder para calificar los actos electorales. Siempre está presente como un ojo acusador o vigilante. Y ahora la oposición busca que dicho tribunal haga algo por ellos y se basan en las denuncias que se hicieron durante el proceso muchas de las cuales son contra ellos  mismos. Pero unas que están tratando de sacar a flote son las que se refieren al Ejecutivo  AMLO porque según ellos su postura desde las Mañaneras favoreció a su organismo. Ya se habla de posibles decisiones de ese tribunal, y se menciona  a la magistrada Janine Otalora, y de la llegada del asunto directamente a la Corte en  circunstancias  extrañas. Esperan tal vez una negociación, un cambio en los resultados y al menos algunos diputados cuando esperaban controlar el Congreso, una dádiva de algún estado o alcaldía, quien sabe. O buscan alterar el triunfo con maniobras. Pero por lo que también se ve, los votantes a favor de la 4T con los triunfos legítimos en la mano, debido a ellos, no están mancos.