Itinerario Político
Morena, la crisis del ‘súperpartido’
Comienzo con la premisa de que la función del líder es producir más líderes, no más seguidores.
Ralph Nader (1934-?) Activista y abogado estadounidense.
Por Víctor Sánchez Baños
Al término del proceso electoral del pasado 2 de junio, los principales partidos políticos del país se enfrascan en procesos electorales internos para seleccionar a sus nuevos dirigentes.
La democracia interna es un asunto que debaten en lo interno (sic). La ropa sucia se lava en casa y se convierte en un secreto, secretísimo de familia.
Pero analicemos cada uno de los tres partidos más importantes del país y luego. En lo general, veremos qué pasaría con las franquicias familiares del PVEM, PT y MC.
MORENA: Hoy, como partido hegemónico es la fuente más importante de puestos laborales del país. Desde la presidencia, secretarías de gobierno, diputaciones, senadurías, alcaldías y millones de posiciones burocráticas, están como premio para quienes se la jugaron con el ganador o están ligados a ellos. Se ha convertido en una mezcla del antiguo PRI y los más antiguos partidos socialistas o comunistas, donde la lealtad se paga con trabajo cerca del poder y dinero.
Está en proceso el cambio de dirigencia y el dueño de la franquicia, quien lo fundó pues, define a la nueva dirigencia. Quien tiene el título de propiedad es Andrés Manuel López Obrador y decidió quien sucederá a Mario Delgado, en la presidencia de ese partido: El dedazo (como en los antiguos tiempos tricolores) se enfoca a Luisa María Alcalde, actual secretaria de Gobernación e hija de Bertha Luján, cercana ideológicamente a AMLO. El resto dela estructura se decanta en los deseos del todavía presidente. No hay vuelta de hoja. El presidente decide, como cuando los presidentes priistas decidían quien era el líder del partido en el poder. Así aseguran control de los órganos legislativos en todo el país.
Todo en Morena, pasa hoy por Palacio Nacional y esto ocurrirá por varios años, mientras la próxima presidenta, Claudia Sheinbaum, no determine en contrario.
PAN: Quien tomó el control del partido fue Marko Cortés, quien acabó con la vieja guardia de panistas herederos de la fundación del azul. La decisión de él está enfocada en Jorge Romero, para mantener la continuidad, aunque hay personajes que tienen mucha fuerza en lo interno, como Damián Zepeda, Kenia López y Adriana Dávila. Los grupos de Felipe Calderón y Vicente Fox, están en la lona. Sólo tienen derecho al pataleo y a que influyan entre los delegados. La elección sólo será de ellos y no está abierta a los militantes. Cerrada, pues. No hay que olvidar que este partido se encuentra muy debilitado tras el proceso electoral pasado y ante la inacción por la manera como quiere apoderarse Morena de una mayoría calificada que no merece. No mueven un dedo ante las trampas del oficialismo, para tomar el control absoluto y sin contrapesos del Poder Legislativo. Sometimiento, en toda la expresión.
PRI: Un grupo de exdirigentes priistas, que fueron los arquitectos de las derrotas recurrentes desde el triunfo de Enrique Peña en el 2018, ahora se niegan a aceptar que se reelija su actual presidente, Alejandro Moreno, Alito. Los motivos ocultos de esos expriistas, ya que la mayoría de ellos no se encuentra en el padrón de militantes, es convertirse en interlocutores con el gobierno y, ello, implica jugosas ganancias en las negociaciones. Si dicen que hoy el tricolor está en ruinas, entonces para qué quieren meter la mano. Definitivamente, se reelegirá Alito y mantendrá un férreo control legislativo, lo que convierte a ese instituto político en una auténtica bisagra en el momento de las mayorías calificadas.
En el PVEM, seguirá como dueño el viejo verde, ya no es niño, Jorge Emilio González. El decide, negocia y derrama posiciones a sus incondicionales, quienes tienen que jugar siempre, al son que les marca. Ni el chiapaneco Manuel Velasco, ni otras cabezas visibles, toman la decisión final. Esto ha fincado una enorme fortuna con González.
En MC, el mandamás es Dante Delgado y no cederá un centímetro de poder a Samuel García, gobernador de Nuevo León; ni al saliente Enrique Alfaro, de Jalisco. El próximo presidente del partido puede ser cualquiera, pero tiene que está en la órbita del veracruzano.
El PT, sigue en propiedad de Alberto Anaya, quien lo único que recibe es el desprecio de Morena. Por ello, el maltrato a los sueños de Fernández Noroña.
El común denominador de todos, es la falta de principios idelógicos. Los mueve a sus militantes el poder y el dinero que da la burocracia mexicana. La olla de oro.
PODEROSOS CABALLERO
DURAZO Y GREENPEACE
El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, anunció con gran espasmo que en agosto próximo iniciará la construcción de una planta de licuefacción de gas natural en Guaymas, una obra que refuerza el Plan Sonora de Energías Sostenibles y promete un importante impulso al desarrollo económico de la entidad. La inversión, liderada por la empresa Amigo LNG, que en México preside Muthu Chezhian, asciende a aproximadamente 6,800 millones de dólares. No solo producirá gas licuado con origen en Texas, sino que también lo exportará a países como India, Indonesia, Japón y Corea, lo que se hará a través del Puerto de Guaymas. El problema es que Greenpeace prepara una campaña contra el proyecto por altamente contaminante y peligroso, ya que el gas natural licuado produce al ser usado como combustible, substancias químicas tóxicas y cancerígenas.
RESPONSABILIDAD SOCIAL Y GOBERNANZA
Querétaro, bajo el gobierno de Mauricio Kuri, se ha posicionado como un relevante hub productivo y tecnológico en México, pues en el estado tienen operaciones grandes empresas multinacionales como Siemens, Amazon Web Services, Google Cloud, Microsoft, Oracle, KIO y Cisco.