Contexto/Fernando Ramírez de Aguilar L.

La narcopolítica de Morena y los recursos provenientes del narcotráfico para las campañas. Esta semana Claudia Sheinbaum Pardo será presidenta electa.

Guillermo González Calderoni, Oriundo de Reynosa, Tamaulipas, fue un comandante de la Policía Judicial Federal –que provino de la Dirección General de Aduanas– y que detuvo y torturó a los principales dirigentes del cártel de Sinaloa en los años ochenta.

Los narcotraficantes dijeron en su momento que fueron traicionados por González Calderoni, quien mantuvo sospechosos vínculos con el cártel de Tamaulipas. Estaba sentenciado a muerte por la mafia, por lo que el gobierno de Estados Unidos lo recibió como testigo protegido, pero fue asesinado el 5 de febrero de 2003 en McAllen, Texas. Este personaje, acusó en su momento a Raúl Salinas de Gortari, hermano del expresidente Carlos Salinas de Gortari, de estar involucrado en el tráfico de estupefacientes.

Y esto viene a cuento porque con el tiempo se supo que González Calderoni tuvo relación de compadrazgo con Miguel Ángel Félix Gallardo, Rafael Caro Quintero, Ernesto Fonseca Carrillo, Juan José Esparragoza Moreno “El Azul”, Amado Carrillo Fuentes “El señor de los cielos” e Ismael “El Mayo” Zambada, así como con otros líderes que en esa época fallecieron y con el fundador y mandamás del Cártel del Golfo, Juan N. Guerra, tío de los hermanos García Ábrego.

Ahora, fuentes de inteligencia militar de México y de las distintas agencias policíacas y de seguridad interior del gobierno de Estados Unidos vienen a confirmar lo que desde hace algunos meses se sabía: habían filtrado a algunos connotados columnistas y periodistas mexicanos y estadounidenses, de que diversos narcotraficantes financiaron las campañas políticas de Morena. Además, las revelaciones de algunos “testigos protegidos” como es el caso del sinaloense Dámaso López Serrano, “El mini Lic.”, quien por cierto está involucrado en el asesinato del periodista Javier Váldez, y cuyo mausoleo familiar fue destrozado hace unos días en Culiacán, muestran que las fiscalías de Estados Unidos tienen un importante expediente en contra de López Obrador y de sus hijos.

Y es que, a siete semanas de que entregue la banda presidencial, la carta que los abogados de Ismael “El Mayo” Zambada García dieron a conocer el pasado fin semana, dónde asegura que fue emboscado en una reunión que convocó Joaquín Guzmán López, hijo del Chapo Guzmán, para mediar en una disputa entre el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya y el diputado federal electo Héctor Melesio Cuén Ojeda –asesinado el mismo día de la captura–, para resolver sobre el control de la Universidad Autónoma de Sinaloa, abre la puerta a más especulaciones.

Desde el pasado 25 de julio, la captura de dos de los más buscados líderes del narcotráfico en México generó un fuerte impacto mediático. La detención de Joaquín Guzmán López, hijo del célebre narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán, y de Ismael Zambada García, conocido como «El Mayo», fue calificada como un golpe histórico al Cártel de Sinaloa. Sin embargo, las circunstancias que rodean sus capturas y su traslado a Estados Unidos han sido objeto de especulación y controversia.

Rubén Rocha Moya y el asesinado Héctor Melesio Cuén Ojeda, los dos son dos originarios de Badiraguato y ambos exrectores de la Universidad Autónoma de Sinaloa, por lo que llama la atención sobre quién debería dirigir la institución, pero, sobre todo, cuál era el poder de “El Mayo” dentro de la propia universidad. También, López Obrador, en todos estos días, ha estado solicitando información al gobierno de Estados Unidos, que se la ha dado a cuentagotas, pero lo más lamentable dentro de este enredo es que no ha habido una postura formal por parte del gobierno mexicano y ahora la revelación sobre el papel de Rocha Moya es determinante, porque no queda sólo en la sospecha y la imputación, sino que se extiende al propio López Obrador por la amistad que los une, y los antecedentes de protección a los hijos de Guzmán durante su sexenio como fue cuando los militares ya habían habían arrestado a uno de ellos y ordenó que lo soltaran so pretexto de evitar una masacre.

No se saben los motivos del Mayo Zambada para haberlo hecho público, pero su comunicado marca una ruptura con Morena y sus gobiernos, y declara la guerra abiertamente en contra Los Chapitos. No se puede olvidar tampoco, por las probables implicaciones futuras, ya que López Obrador está a siete semanas de convertirse en ciudadano y aunque diga que es honesto y todo lo dicho por los testigos protegidos requiere de pruebas, por ahora no se las van a mostrar. Y yo no creo que nada más sean dichos.

Por ahora, la Fiscalía General de la República, dio a conocer en un comunicado, que “con motivo de las declaraciones oficiales de la representación diplomática de los Estados Unidos de América en México, así como documentos que el abogado de Ismael “N”, presuntamente dio a conocer públicamente a los medios en ambos países, se han llevado a cabo diligencias específicas en la zona conocida como Huertos del Pedregal de Culiacán y en el  aeródromo que posiblemente se utilizó en este caso, al igual que en todas las pistas que puedan ser vinculadas específicamente con dichas presunciones. También se han diligenciado todas las solicitudes de documentación e información sobre navegación aérea; así como información migratoria entre México y Estados Unidos de América al respecto; lo cual se está incorporando de inmediato a la carpeta correspondiente.

“Se está solicitando, con carácter de urgente, a la fiscalía general del Estado de Sinaloa que se avenga a la atracción federal del caso del homicidio de Héctor “M”, por sus posibles vinculaciones con el tema principal que se está analizando. Por lo que toca al gobernador de Sinaloa, la representación de la FGR en ese estado ya se ha comunicado con él, para obtener toda la información respectiva que sea procedente”, indicó la FGR. Veremos que más sale de esta caja de pandora. Por lo pronto, en la Palacio Nacional debe haber mucha preocupación y el embajador Ken Salazar no lo podrá ayudar.

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se alista para declarar la validez de la elección presidencial y entregar la constancia de presidenta electa a Claudia Sheinbaum Pardo. Esto, según los magistrados, tras no encontrar hasta ahora, elementos jurídicos que puedan revertir su triunfo.

Mónica Soto, presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral, entregará este jueves en sesión solemne el diploma de presidenta electa a Claudia Sheinbaum Pardo, luego de emitir el cómputo final con los resultados definitivos tras anular o confirmar la votación de todas las casillas instaladas en todo el país, y declarar los números oficiales con los que se declarará a Sheinbaum ganadora.

Una vez que esto ocurra, los magistrados tendrán que resolver lo concerniente a la distribución de diputados y senadores plurinominales y con ello comenzarán las presiones de Morena que pretende contar con la mayoría absoluta en el Congreso federal para poder llevar a cabo las reformas constitucionales anunciadas por el propio López Obrador, entre éstas la del Poder Judicial. Lo que está por verse es si la presión presidencial logra doblar a Guadalupe Taddei Zavala, presidenta del INE, quien el domingo pasado recibió a lo que queda de la marea rosa en un mitin donde se le exigió solucionar el tema de las plurinominales.