
De norte a sur
La Primera Presidenta Quiere Aletear Sola
Claudia Sheinbaum y Sus Primeros ‘Solitos’
¿Está en Busca de la Reconciliación Ciudadana?
¿Los Expresidentes Respaldarían a Claudia?
Jorge Herrera Valenzuela
No es hora de echar al vuelo las campanas.
Actuemos con la cabeza fría, dice la Primera Presidenta de México.
Quien lleva las riendas de la Nación demuestra, con sus acciones, que pugna por la unidad nacional, como en su momento, bajo otras circunstancias, el último presidente militar convocó al pueblo.
Desde antes de llegar a su fiesta, en lugar del mitin proyectado, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo tuvo el respaldo de gobernadores de otros partidos políticos, seis asistieron al evento.
El pasado domingo, la primera mandataria se presentó en la Plaza de la Constitución con la imagen de mujer inteligente frente a la crisis que plantea el presidente norteamericano, amenazando con imponer altos aranceles a los productos mexicanos que se exporten a la Unión Americana.
Simplemente estamos viendo que la huésped de Palacio Nacional, da sus primeros pasos con firmeza y da muestra de encauzarse institucionalmente. Creo que, pese a ello, no hay visos de rompimiento con el pasado.
Su anuncio de recorrer los Estados, para coordinar con los gobernadores y gobernadoras el programa prioritario relacionado con la salud, es de singular trascendencia.
Suspende “las mañaneras del pueblo”, lo que es aplaudible. Es el principio de no gobernar desde micrófonos y cámaras de televisión, con supuestos reporteros.
¿INTENTOS DE RECONCILIACIÓN?
La fiesta popular en el Zócalo marcó algo importante.
Claudia Sheinbaum Pardo da un paso que dibuja los primeros trazos de su estilo de manejar la política presidencial.
Sabe que las y los mexicanos estamos divididos. Los distanciamientos entre familiares, amigos y compañeros de trabajo, no desaparecen. Creemos que hay dos Méxicos. Borrar eso, es tarea para el resto del sexenio.
La reconciliación ciudadana no se dará de la noche a la mañana. Ya empezó. Seamos optimistas. Lo vivimos el domingo. La presidenta habló de cinco proyectos. Es la primera vez que se muestra sonriente, segura y discreta en su discurso.
¿Qué marcó la reunión dominical?
El preludio del diálogo directo con gobernantes. El segundo paso, el acercamiento hacia el pueblo. Eliminar miedos ante las manifestaciones callejeras. Abandonar la política de “blindar” Palacio Nacional, cuidando discretamente el espacio residencial.
Por ahora, otra buena señal, la presencia de gobernadores del PAN, del Verde Ecologista y de Movimiento Ciudadano. ¿Empieza la política reconciliatoria y el acercamiento de partidos políticos con el que está en el poder? Ausentes los dos del PRI, Coahuila y Durango.
Un incidente que provocó inmediatos comentarios, es el momento en que la Primera Presidenta de México pasó de largo, a espalda del grupo formado por los líderes del Congreso de la Unión que eran fotografiados con Andrés Manuel López Beltrán. El video fue subido inmediatamente a las redes sociales.
Es del dominio público la ambición política de Andy, ya en plena campaña, para el 2030, amparado en su cargo en el comité ejecutivo nacional del partido en el poder. Aparecieron los primeros en “proclamarlo” candidato presidencial.
UNIDAD PATRIÓTICA EN LOS 40s
En los años cuarenta, desatada la Segunda Guerra Mundial, el presidente Manuel Ávila Camacho determinó colocar a su antecesor, el general Lázaro Cárdenas del Río, como titular de la Defensa Nacional.
De mayo de 1942 a agosto del 45, el michoacano participó en la estrategia de combate. Le correspondió la selección y preparación del Escuadrón 201 que tomó parte en la histórica batalla bélica.
Ávila Camacho supo que requería del apoyo del pueblo, aunado a la identificación igualitaria de sus antecesores y reunió en Palacio Nacional a los supuestamente irreconciliables Plutarco Elías Calles y Lázaro Cárdenas del Río, a Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo L. Rodríguez.
Eso le valió ser llamado Presidente de la Unidad, además de Presidente Caballero y ser el único de los mandatarios sexenales que declaró ser católico e inclusive acudía a misa, de las 12:00, los domingos, en la Catedra Metropolitana.
EL COMERCIO DEL FENTANILO
Comento lo anterior, porque México enfrenta hoy, en la primera cuarta parte del Siglo XXI, una serie de amenazas por parte del presidente de los Estados Unidos de América, empecinado en aplicar su política en territorio mexicano, so pretexto de problemas que tiene en su país.
Para el presidente yanqui, el número uno es el de la introducción del fentanilo, que causa cientos de miles de muertes. Sin embargo, hasta ahora no hay una campaña para que dejen de consumir la droga como no se exhiben los capos norteamericanos que la comercializan y distribuyen.
El consumo de drogas entre jóvenes y adultos norteamericanos, de acuerdo con el mandatario de cabellera naranja, se debe a que en México se trafica y se produce fentanilo para comercializarlo en aquellas latitudes, según informes de los agentes de la DEA, CIA el FBI, adjuntos a los del embajador en México.
Trump declaró terroristas a los carteles de narcotraficantes que existen en tierra azteca, amenaza con entrar a México para liquidar a esos delincuentes. Inclusive se detectó que está usando drones, desplazándolos sobre el espacio aéreo mexicano.
La presidenta Sheinbaum Pardo tomó una decisión inédita. Envío a 29 mexicanos relacionados con procesos penales, individuos que estaban en las prisiones y a los que reclamaban los norteamericanos.
En ese grupo se incluyó a Rafael Caro Quintero, pionero en el cultivo, procesamiento y comercialización de la droga.
No estoy para defenderlo, pero a ese ciudadano se le puso preso, procesó y sentenció por los delitos cometidos en México que lo relacionaban con el asesinato del agente “Kiki” Camarena Salazar, infiltrado por la DEA (Administración para el Control de Drogas) con los narcos, hace 40 años.
Caro recuperó su libertad tras 28 años de prisión, ahora lo “juzgarán” los norteamericanos. Inclusive es candidato a la pena de muerte. Por ese crimen en una prisión de Los Ángeles, California, murió el jalisciense Rubén Zuno Arce, dueño de una casa donde, dijeron, fue muerto Enrique Camarena Salazar.
La entrega de 29 presuntos delincuentes al gobierno de Estados Unidos, no es suficiente. Donald Trump pide que le entreguen a “narcopolíticos” mexicanos.
Recordemos que, en el aeropuerto de Los Ángeles, fue detenido el divisionario Salvador Cienfuegos bajo cargos de estar relacionado. El secretario de la Defensa Nacional, en el sexenio de Peña Nieto, fue liberado, por la intervención personal y directa del Presidente de México.
URGE LA UNIDAD NACIONAL
Ni alarmismo, mucho menos amarillismo –como se dice periodísticamente–, pero hay que estar unidos todos los mexicanos. Jóvenes, adultos y los de la Tercera Edad, porque la guerra no es con armas sino con medidas dictatoriales, unilaterales, de un individuo que pretende doblegarnos.
Debemos actuar con conciencia no con violencia. Hace ochenta años fue de resistencia. La guerra obligó al presidente Ávila Camacho a dejar el terreno de la neutralidad. Los alemanes hundieron a los buques petroleros mexicanos Faja de Oro y Potrero de Llano.
En este 2025 México enfrenta caprichos delirantes de un empresario que, por segunda vez, es presidente del país más poderoso del mundo. En esta ocasión es mantener la comunicación al alto nivel para evitar más golpeteo.
Imponer aranceles porque en tierras mexicanas se fabrican automóviles de marcas extranjeras, es agredir a la soberanía.
Argumentar que de aquí sale la droga para consumo estadounidense, porque la demanda yanqui es abrumadora, es no equilibrar acciones para impedirlo.
Insistir en que el gobierno mexicano cierre las fronteras a los migrantes que cruzan, por México, para internarse en Estados Unidos, sin aplicar una política de diálogo con los presidentes de los pueblos que abandonan sus connacionales.
La Primera Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, está procediendo con cautela. No puede, ni debe, confiarse por los halagos del Señor DT.
Tampoco habrán de detener su actuar las críticas, que aparecen en medios impresos, en las redes sociales y de comentaristas, porque no se trata de una defensa partidista, no estamos en una batalla personal.
México está colocado contra la pared para perjudicarlo, fundamentalmente, en su economía.
Y, ¿LOS EXPRESIDENTES?
Reitero, debe darse la UNIDAD NACIONAL, sin colores, símbolos, siglas partidistas, membretes políticos o posturas oportunistas.
El nacionalismo no es un producto comercial. No es una bandera electorera. No es para colocarlo en un estandarte. Es la clara definición que data desde los días en que el emperador Cuauhtémoc defendió a su pueblo del embate de los conquistadores españoles.
Me gustaría escuchar la opinión de los que despacharon en Palacio Nacional y vivieron en Los Pinos.
En orden cronológico: carlos salinas de gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, Enrique Peña Nieto y el tabasqueño que anda escondido.
¿Sería posible verlos juntos en el balcón central de Palacio Nacional, flanqueando a la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, tres a la derecha y tres a la izquierda?