
UNAM lidera producción científica, innovación y transferencia tecnológica
CIUDAD DE MÉXICO, 25 de abril de 2025.- La Escuela de Búsqueda, Rescate y Buceo de la Secretaría de Marina (Semar) se posiciona como un referente en la formación de profesionales en salvamento.
Desde su fundación, ofrece una amplia variedad de cursos diseñados para equipar a los aspirantes con las habilidades necesarias para enfrentar situaciones críticas bajo el agua y en la superficie.
Entre los cursos más destacados que imparten se encuentran el buceo básico y de combate, así como medicina subacuática y operaciones con cámara hiperbárica.
Un componente esencial del ingreso a los cursos es una rigurosa prueba de presión en la cámara hiperbárica, la cual determina si un candidato está apto para las exigencias del buceo.
Los nuevos alumnos comienzan su formación con el curso de buceo de scuba. En este nivel inicial, se familiarizan con el equipo que les permite realizar inmersiones hasta 30 metros de profundidad.
Para aquellos que necesiten superar esta limitación, se les proporciona un tanque doble, fundamental para realizar inmersiones más profundas.
Una vez completado el buceo básico, los estudiantes avanzan al curso de detraco submarino, donde emplean un equipo de suministro de aire de superficie.
Este dispositivo permite mantener comunicación constante entre el buzo en el agua y el equipo en superficie, siendo esencial en tareas como corte y soldadura submarina.
El siguiente paso en su capacitación incluye el uso de equipos de buceo semicerrado, que combinan aire y oxígeno para permitir inmersiones de hasta 100 metros de profundidad.
Esta mezcla de gases es crucial, dada la naturaleza del aire comprimido y los efectos del nitrógeno a grandes profundidades.
Posteriormente, los buzos son introducidos al sistema de circuito cerrado, que utiliza oxígeno al 100 por ciento y tiene un límite de profundidad de nueve metros, ideal para misiones de recuperación de objetos en entornos controlados.
En paralelo, en el área de búsqueda y rescate, las capacitaciones disponibles incluyen nadador de rescate de superficie, rescate desde helicóptero y patrón de embarcaciones de respuesta rápida Defender, capaces de alcanzar velocidades de hasta 90 kilómetros por hora.
Estas embarcaciones son esenciales para atender emergencias en condiciones adversas, como tormentas.
El equipamiento de rescate incluye herramientas sofisticadas como camillas de evacuación y canastillas para rescates aéreos.
Estas herramientas son fundamentales para movilizar a personas lesionadas, ya sea en el mar o en operaciones aéreas, asegurando que los rescatistas puedan operar de manera eficiente y efectiva.
En la Escuela de Búsqueda, Rescate y Buceo están comprometidos a proporcionar una formación integral para no solo preparar a sus estudiantes para actuar en emergencias, sino que también fomente su desarrollo personal y profesional.