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CIUDAD DE MÉXICO, 18 de mayo de 2025.- Al asistir al inicio del pontificado de León XIV, la Secretaria de Gobernación de México, Rosa Icela Rodríguez, representó a México junto con la comitiva mexicana que viajó con el propósito de entregar una invitación al Papa 267 de la historia para que visite México.
“Desde la Basílica de San Pedro, el Papa León XIV envió saludos a la Presidenta Claudia Sheinbaum y al pueblo de México”, publicó la secretaria de Gobernación en su cuenta de X.
Además, reiteró sus felicitaciones al Papa León XIV y la confianza para que su vocación de apoyo hacia las personas migrantes y su cercanía con las comunidades indígenas sea de gran relevancia para todos los pueblos.
Rosa Icela Rodríguez confirmó la entrega de la carta invitación para visitar México, durante la recepción a las delegaciones de los países del mundo que asistieron a la ceremonia por el inicio del nuevo pontificado.
En las instalaciones de la Embajada de México en la Santa Sede, la secretaria de Estado hizo un reconocimiento a las coincidencias entre la inclinación del Papa Robert Francis Prevost “hacia quienes menos tienen, con el principio que enarbola nuestro gobierno humanista mexicano de primero los pobres”.
Reconocemos, dijo, la labor social del Papa, así como su vocación de apoyo hacia las personas migrantes y su cercanía con los pueblos originarios de América Latina, y por eso también se hace extensiva la invitación de la Presidenta y del pueblo mexicano para que visite el país.
“Sabemos que no habrá de inmediato una respuesta para la invitación, pero queremos que tenga presente el deseo del pueblo de México. Estaremos atentas a la respuesta del Jefe del Estado Vaticano, sobre esta misiva” advirtió.
El pasado 26 de abril, la secretaria también fue enviada a la misa de exequias del Papa Francisco.
La titular de la Segob estuvo acompañada por el embajador de México en el Vaticano, Alberto Barranco Chavarría.
El papa León XIV llamó a crear una iglesia unida que se “convierta en un fermento para un mundo reconciliado”. “En nuestro tiempo vemos aún demasiada discordia y heridas causadas por el odio, la violencia y los prejuicios, por el miedo a lo diferente, por un paradigma económico que explota los recursos de la tierra y margina a los más pobres.