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MÉXICO, DF, 31 de enero del 2015.- Falta un día para la patada inicial de la edición XLIX del Super Bowl, a celebrarse en el estadio de la Universidad de Phoenix. Antes de saber quién obtendrá el trofeo Vince Lombardi si los Seahawks o los Patriots, en Quadratín México te recordaremos cada uno de los días de esta semana los ocho partidos más emocionantes del Gran Juego.
Super Bowl XLII
La última vez que el Super Domingo se disputó en el Estadio de la Universidad de Phoenix, se disputó, tal vez el partido más emocionante en la historia de la NFL. Ese día, el 3 de febrero del 2008, dos de los protagonistas del partido de este domingo estaban presentes y eran los grandes favoritos: el quarterback Tom Brady y el coach Bill Belichick con los Patriots.
En una temporada de ensueño, Nueva Inglaterra buscaba algo que sólo se ha visto en una ocasión en la historia: terminar la campaña invictos. Esto sólo lo han logrado los Dolphins de 1972, quienes se proclamaron campeones con record de 17-0 (14-0 en temporada regular). Por su parte los Pats, llegaban al Super Bowl con récord de 18-0, pero necesitaban una victoria más para consumar la hazaña, la más importante.
Por su parte, sus rivales habían llegado de rebote al partido, tuvieron na temporada mediocre, perideron sus primeros dos partidos, luego ganaron seis en fila y después de su semana de descanso calificaron como comodines con mediocre record de 4-4. En postemporada fueron a ganar a Tampa Bay, luego vencieron a domicilio a los Cowboys, que habían terminado como el número de la Conferencia y ganaron su boleto al Super Bowl tras vencer en tiempo extra a los Packers en el Lambeau Field, en lo que a la postre sería el último partido de Frett Favre con este equipo.
Además Pats y Giants se habían visto las caras dos veces ese mismo año. En ambos ganaron los Pats 27-20 en pretemporada y dramáticamente 38-35 en la última semana del año, ambos partidos disputados en Nueva York.
El partido fue de menos a más, las defensivas y el golpeo se impusieron. Al final del tercer cuarto el partido se mantenía 7-3 en favor de los Pats. De hecho para la recta final del encuentro, el partido se mantenía 14-10 todavía en favor de los de Brady, con 5:12 por jugarse, tras una anotación a Randy Moss.
Entonces vino la gran serie. Con 2:40 en el reloj, cerca del medio campo, Eli Manning pasó a la historia porque en tercera y cinco por avanzar en su propia yarda 44 logró escapar de la presión de tres linieros de Nueva Inglaterra quienes lo tenían prácticamente capturado, con un dramático movimiento gano unos segundo más y por fin encontró en lo profundo al receptor David Tyree, quien se elevó en el aire con una marca hermética de Rodney Harrison, entre cuatro rivales, Tyree atrapó el balón con ambas manos y se ayudó con el casco para mantener la posesión, resistió el golpe del defensivo y la caída al césped, para una ganancia de 32 yardas. Una jugada antes, uno e sus típicos pases errados estuvo a punto de ser interceptado.
Con 35 segundos por jugarse Manning encontró en las diagonales a Plaxico Burress, en pase de 13 yardas, para dar definitivamente la vuelta en el marcador 17-14, terminar la fiesta de los Pats y convulsionar al mundo, pues eran favoritos en Las Vegas por 12 puntos. Manning ganó el primero de sus dos anillos de campeón y fue nombrado el jugador más valioso tras completar 255 yardas y dos anotaciones.
Revive esta espectacular serie ofensiva que ha pasado a la historia: