Lilia E. Cárdenas Treviño, líder social y promotora cultural
MÉXICO, DF, 13 de abril de 2015.- La muerte del escritor alemán Günter Grass, galardonado en 1999 con el Premio Nobel de Literatura, tomó hoy por sorpresa a Alemania pero una vez pasado el primer momento la opinión pública reaccionó con numerosos comentarios, informa la agencia de noticias del Estado mexicano, Notimex.
El escritor de 87 años murió a consecuencia de una severa infección. Fue internado en el Hospital de Lübeck y falleció el lunes temprano rodeado de su familia, de acuerdo a la información que acaba de dar a conocer su oficina en esa ciudad.
Su secretaria, Hilke Ohsoling, externó que a pesar de su avanzada edad, su muerte resultó sorpresiva. Todavía el domingo sostuvo un encuentro con ella.
El 28 de marzo había encabezado el estreno en el teatro de una nueva versión de su novela, el Tambor de Hojalata, en el Teatro Thalia. Acudió acompañado de su esposa y fue ovacionado por el público. Disfrutó la ocasión y estaban presentes la mayoría de sus hijos.
El museo en Lübeck sobre el escritor lleva el nombre de Casa de Günter Grass, y es ahí donde se ubica su secretariado, que a su vez colocó su poesía Provisiones en su página web.
En ella, Grass escribió que quería ser enterrado con una bolsa de nueces y con dientes nuevos “para que cuando cruja donde me encuentro, se pueda suponer: es él, es el de siempre”.
El presidente de Alemania, Joachim Gauck, manifestó que la obra de Grass es “un impresionante espejo de nuestro país, y ésta permanecerá siendo una parte de su herencia literaria artística”.
Resaltó también el rasgo del carácter de Grass de desencadenar controversias políticas y sociales, y lo calificó de ser un gran autor y un polémico espíritu político.
Agregó que durante su vida nunca rehuyó la controversia política, el debate, ni temió a la crítica. Sus debates políticos ejercieron influencia en la sociedad durante décadas.
“En sus novelas, narraciones y cuentos, así como en su lírica, se encuentran las grandes esperanzas y equivocaciones, los miedos y los anhelos de generaciones enteras”, consideró.
La Asociación de los Libreros Alemanes, la más influyente editorial de Alemania, expresó que Günter Grass sentó precedentes a nivel mundial. Destacó que Grass ha sido uno de los grandes escritores de Alemania y al mismo tiempo un espíritu controversial.
El presidente de esa Asociación, Heinrich Riethmüller, destacó que la obra de Grass logró que la literatura se volviera una poderosa voz en la sociedad. “Lo vamos a extrañar”, dijo.
El Premio Nobel de Literatura 2002, el escritor húngaro, Imre Kertesz, expresó este lunes su pesar por la muerte de Grass: “no nos ocupábamos de los mismos temas pero nos estimábamos en forma recíproca”.
Kertesz, quien vive en Berlín desde hace años, se encuentra muy enfermo en un hospital de su natal Budapest, la capital de Hungría.
El presidente del Bundestag, el demócrata cristiano Norbert Lammert, declaró en Berlín que Grass fue una gran instancia política en Alemania y que con su muerte no solo se pierde a uno de los principales exponentes de las letras alemanas, sino también un comprometido ciudadano, que siempre tomó posición ante los asuntos públicos.
“No esquivó nunca una controversia, por más fuerte que ésta fuera. Por el contrario, la buscaba cuando lo consideraba importante. Eso lo hizo una instancia en el debate político que a veces resultaba molesta y en otras ocasiones perturbaba”, añadió.