Visión financiera/Georgina Howard
El fin de tres años de placeres…
Este jueves 30 de abril de 2015, todo se acabó en el salón de plenos de la Cámara de Diputados. Se acabó, por el momento, la simulación. Y quedó integrada la Comisión Permanente que cubrirá el tiempo en tanto se inaugura la XLIII legislatura que será elegida el 7 de junio.
Las grandes reformas estructurales, aprobadas por los legisladores que se van, así como se inflaron así se desinflaron.
Y ahora los políticos, especialmente los encargados de impulsar la economía, sólo viven de puras ilusiones, imaginando que en el 2025 vendrán 300 mil millones de dólares por inversiones petroleras, mientras la vida se va acabando tan rápido como el rollo de papel sanitario. Esos 350 mil millones ya deberían de haber venido pero no por el petróleo, sino por todas la ventajas competitivas que tiene la economía. Sólo así podríamos haber crecido al 5 por ciento y crear una buena cantidad de empleos.
Los legisladores y principalmente las mujeres diputadas dedicaron más de una hora a denunciarse mutuamente en torno a la misoginia panista del gobernador Padrés en Sonora. Los verdes y los priístas defendieron a Claudia Pablovich de los ataques machistas azules. Los panistas dijeron defenderla como mujer, pero la acusaron de traficante de influencias. Malú Micher lamentó que las diputadas no hayan sido más decididas para lograr más contundentes beneficios para el sector femenil de esta humanidad mexicana.
La diputada Malú Micher junto con un grupo de diputadas de izquierda y del PAN denunció a los priístas e incluso llamó a conferencia de prensa para lamentar que el PRI haya impedido la aprobación de la reforma integral a la ley general de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia.
Algunos diputados de la izquierda, particularmente de Morena y del Movimiento Ciudadano salieron en defensa de Marcelo Ebrard Cassaubón, y protestaron porque los ministros del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le desconocieron su candidatura a diputado federal.
La verdad es que los ministros inventaron ahí un pretexto legal y se excedieron en sus interpretaciones de la ley electoral. No era para tanto. Se vieron más papistas que el papa. Qué más daba que el ex jefe de gobierno fuera candidato. Pero a leguas se vio que los ministros fueron maiceados por un poderoso enemigo de Ebrard. Y mientras son peras o son manzanas, pues el ex perredista, ex verde, ex democrático, ex priísta ya no podrá gozar de las mieles de los tres años de gloria y honor de un diputado mexicano.
El resto del tiempo los diputados se dedicaron a sacar una serie de dictámenes pendientes para dejar lo menos en la herencia a los diputados que llegarán a la Cámara el primero de septiembre venidero.
No se volvió a hablar de la reforma política del Distrito Federal, que crea el estado 32 de la federación con el nombre de Ciudad de México Autónoma. El histórico dictamen aprobado por el Senado de la república se quedó en la nevera de San Lázaro sólo porque no contó con los votos de la fracción panista, principalmente. Una fuerza política sin fuerza real en el Distrito Federal fue el factor de que por el momento los ciudadanos de segunda distritofederalenses se quedaran como la novia aquella: vestidos y alborotados.
Ya hasta le estaba buscando gentilicio a los nacidos en esta noble y leal ciudad de los palacios. Pero bueno, un día no muy lejano seremos el estado 32, aunque hace algunos ayeres mi querido Gerardo Pensamiento luchaba porque el rico y maravilloso Soconusco se desprendiera de Chiapas fuera consagrado como el estado 32 con el nombre de Estado del Soconusco.
Pues a los diputados y a las diputadas se les acabaron los tres años de gloria, aunque seguirán cobrando su dieta hasta agosto venidero. Se les acabó la gloria les comenté a un pequeño grupo de diputadas que conversaba en un pasillo entre las curules. Y ¿ahora qué sigue? Les pregunté. Una de ellas tomó inmediatamente la palabra para responderme muy alegre, muy jocosa: ¡la ignominia! Expresión que provocó una carcajada de todas las muchachas.
Hacia el final, los diputados y diputadas se engolosinaron con el tema de las desapariciones forzadas. Y qué saben de represión, de muerte, de desapariciones, del dolor de personas que perdieron un hijo, un padre, una padre, un hermano. Otra manera de la simulación.