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MÉXICO, DF, 10 de septiembre de 2015.- La incineración de los cuerpos de los 43 normalistas de Ayotzinapa en el basurero de Cocula sí podría haber ocurrido tal y como informó en su momento la Procuraduría General de la República (PGR), según sostuvieron académicos especializados en fuego.
Entrevistados por el diario Milenio, el doctor Guillermo Rein, ingeniero mecánico (maestría y doctorado) por la Universidad de California en Berkeley y la doctora estadunidense Elayne Juniper Pope, antropóloga forense por las universidades de Arkansas y de Tennessee, aseguraron que la versión de la PGR sobre la incineración de los cuerpos de los 43 normalistas de Ayotzinapa sí podría haber ocurrido en el basurero de Cocula.
Los expertos fueron consultados luego de los cuestionamientos a la versión ofrecida por la PGR sobre las conclusiones del Caso Iguala, que dejaron inconformes incluso a los padres de los estudiantes víctimas de desaparición forzada, el pasado 26 de septiembre.
«Sí, es posible que los cuerpos de los 43 estudiantes se hayan quemado hasta las cenizas en un periodo de seis a 24 horas», aseguró la doctora Pope, quien ha colaborado a resolver crímenes en Estados Unidos a través del estudio de huesos calcinados.
«No necesitas todo ese combustible (toneladas de troncos y llantas) para conseguir que el cuerpo se carbonice y los huesos se calcinen», agregó.
El doctor Rein también respaldó la versión oficial.
«Desde el punto de vista del comportamiento del fuego, sí, creo que es posible cremar 43 cuerpos mediante la construcción de un gran fuego. Según los expertos en cremación, se necesita mantener un ambiente como mínimo de 800 grados durante unas dos horas», explicó el español también reconocido por su labor en la Universidad de Edimburgo, donde participó en el Centro de Ingeniería contra Incendios.
«Un incendio con base de varios metros de largo por cada lado, bien alimentado de combustible sólido (madera y neumáticos) y combustible líquido (gasolina y diesel) puede generar temperaturas en exceso de mil grados durante varias horas», aseguró.
Ambos expertos coincidieron en que no serían necesarias las toneladas de cumbustible y madera para alcanzar condiciones favorables a la incineración, debido a propiedades de la piel, las ramas y la exposición al aire libre.
«No necesitarían agregar mucho porque los cuerpos empezarían a quemarse por sí mismos y arderían durante varias horas con las condiciones ideales», explicó la doctora Pope.
Para la consulta, Milenio envió un video del basurero de Cocula y un reporte con los antecedentes, contexto y conclusiones del Caso Iguala.
Entre las principales críticas, destacó la de Jorge Antonio Montemayor, investigador del Instituto de Física de la UNAM, quien afirmó que para la quema de esos cuerpos se requerirían 33 toneladas de troncos de árboles o 995 llantas, en vías de alcanzar una temperatura de mil grados centígrados.