Alfa omega/Jorge Herrera Valenzuela
El “Chapotour”
Hasta qué grado llegará la crisis de credibilidad del gobierno mexicano y la urgencia que la apremia para restañar las heridas causadas a su imagen debido a varios episodios recientes -la matanza de 22 personas en Tlatlaya hace más de un año, la desaparición de 43 estudiantes en septiembre pasado, la Casa Blanca de la esposa del primer mandatario y ahora la fuga de Joaquín “El Chapo” Guzmán-, que ha tenido que recurrir a toda clase de maniobras para contrarrestar el descrédito que cimbra al gobierno.
Ello ha obligado a inventar mecanismos de “control de daños” de dudosa eficiencia que a la postre podrían resultar contraproducentes. Ello explica lo que ahora se ha dado en llamar el “chapotour”, que no es otra cosa que el peregrinar de legisladores, funcionarios y periodistas -no decenas, sino varios centenares-, a la celda donde pasó “El Chapo” sus 14 meses tras su segundo arresto el 22 de febrero del 2014.
En los últimos días se han publicado numerosas crónicas sobre este recorrido hacia la celda número 20 de la zona de Tratamientos Especiales de la cárcel de alta seguridad, esa que se daba en llamar “El Alcatraz mexicano”, por la célebre prisión ubicada en una isla rocosa frente a la Bahía de San Francisco de la que muy pocos lograron escapar.
¿Para qué abrir las puertas de la inexpugnable fortaleza carcelaria ubicada en Almoloya de Juárez, estado de México, que antes se llamó La Palma y antes todavía simplemente la prisión de Almoloya a los ojos de esos voyeuristas profesionales que son los reporteros, que como se sabe suelen ser demasiado indiscretos y a veces hurgar más allá de donde se les permite?
Quizá para entender este súbito y extraño alarde de seudotransparencia habría que comprender hasta qué nivel ha llegado el descrédito oficial.
Como esto es muy difícil de medir, con la única herramienta con que se cuenta para ello, es con las encuestas. Y precisamente un sondeo publicado por el diario Reforma el pasado día 16 -es decir, hace cosa de una semana-, revela que el 54 por ciento de los mexicanos duda que se haya escapado por un túnel y cree que lo hizo “de otra forma” y el 65 lo atribuye a la incompetencia de las autoridades.
El operativo de relaciones públicas montado por el gobierno ha permitido por primera vez contar con imágenes del túnel de mil 500 metros de largo por el que escapó en forma espectacular “El Chapo” Guzmán, por segunda vez en su larga carrera delictiva. La primera tuvo lugar, como se sabe, en enero de 2001, con Vicente Fox.
En aquella ocasión se escapó, según se dice, escondido en el carrito de la ropa sucia, pero hay otras versiones de que salió por la puerta principal y escoltado por policías federales.
Como aquella vez, ahora muchos mexicanos creen se fugó por la puerta grande, traspasando los casi 20 filtros que hay para salir de la supervigilada prisión que presumía ser hasta hace poco la más segura de América Latina.
Como si se tratara de un documental de National Geographic sobre la creatividad y capacidad de los norvietnamitas para construir túneles, durante la guerra de Vietnam, los periodistas de la televisión han mostrado en detalle este “prodigio” de la ingeniería. Con micrófono en mano, revelan palmo a palmo cada escondrijo de esta gruta que permitió a “El Chapo” reírse de las autoridades y ponerlas en ridículo.
La prensa narra con un cuidado excepcional que el sábado de la gran fuga, “El Chapo” veía el popular programa de entretenimiento de Televisa llamado “Sabadazo” y que de pronto dio tres recorridos de lado a lado de su celda en forma de “L” antes de desaparecer en el “punto ciego” del piso de su regadera.
“Momentos después -prosiguen las crónicas-, ya no se supo nada de él y se activaron todas las alarmas pero a pesar de que comenzó de inmediato su búsqueda hasta ahora se desconoce su paradero”.
Presumir que “El Chapo” demoró sólo 12 segundos en salir de la celda -y mostrar el calabozo sucio y con aroma a humedad donde vivía así como la tapa de 10 centímetros de espesor que contrasta con el metro de espesor del concreto de las paredes-, no se entiende como estrategia de relaciones públicas. El gobierno exhibe su patética desnudez y revela sus flancos débiles. ¿Trata de justificarse? ¿Pretende dar a entender que no es que el gobierno no hubiera hecho su parte, sino que el Chapo era demasiado listo como para burlar todos los controles?
Al margen del morbo y de la apología del crimen que se hace a través de los “chapotours” tal vez el gobierno mexicano lo que debería promover es mostrar a los ciudadanos lo que está haciendo para recapturar al peligroso delincuente, para castigar a los responsables, aceptando las renuncias no sólo de quienes eran los responsables directos de la cárcel, sino de sus propios jefes, porque esas dimisiones son una manera de decirle a la sociedad que la fuga es un hecho imperdonable y que no volverá a ocurrir.
También ayudaría más establecer compromisos firmes contra la delincuencia y aceptar que los responsables de la vigilancia de “El Chapo” fallaron, cometieron errores y por ello deben ser castigados.
El comisionado de Seguridad Nacional, Monte Alejandro Rubido, parecía sentirse orgulloso de “El Chapo”, ponderando su maestría para construir túneles, la hazaña de salir de una fortaleza, la audacia para superar todos los controles que se le pusieron, en vez de pedir perdón a los mexicanos por haber fallado y mostrar por vergüenza que estaba dispuesto a dejar su cargo por no estar a la altura de la encomienda que se le había dado.
Es el país al revés. Como si los mexicanos hubiéramos atravesado el espejo como lo hizo Alicia en el país de las maravillas.
GRANOS DE CAFÉ
En las elecciones del pasado domingo para renovar el Congreso de Chiapas y las 122 alcaldías de la entidad, como en las elecciones federales intermedias, se derrotó no sólo el abstencionismo, sino a los promotores de la antidemocracia, leáse la CNTE y de refilón MORENA, que no obtuvo triunfo alguno.
Con el 90 por ciento de las actas computadas, el triunfo en 90 de las 122 presidencias municipales se lo acreditaron los Partidos Verde Ecologista (PVEM) Revolucionario Institucional (PRI), Chiapas Unido, Mover a Chiapas y Nueva Alianza.
La joya de la corona, Tuxtla Gutiérrez, fue para la alianza de mayor peso PRI-Verde-PANAL-Mover a Chiapas, que llevó como candidato a Fernando Castellanos Cal y Mayor -quien a pesar de su juventud, posee una experiencia política y trayectoria que lo hicieron el candidato idóneo para la coalición que lo postuló-, y que de acuerdo a los más recientes resultados, triunfó por estrecho margen frente al candidato del PAN.
La coalición formada por PVEM, PRI y partidos afines, igualmente ganaron en la elección para renovar a los diputados locales, y dejaron sin triunfo alguno a sus opositores en los 24 distritos electorales.
Naturalmente el gobernador Manuel Velasco Coello puede considerarse satisfecho con el triunfo de su partido pero sobre todo, con la derrota del abstencionismo, puesto que sufragaron 55 por ciento de los chiapanecos inscritos en el padrón electoral -cifra muy semejante a la registrada en las elecciones federales de junio 7-, lo que habla de la vocación democrática de la población, pero, especialmente, del rechazo a la violencia que promueven actores que han probado defender intereses de grupo.
Aunque sus detractores se han empeñado en asegurar que en Chiapas se llevó a cabo una “elección de Estado” y que el titular del Ejecutivo empleó todo el poder a su alcance para que la alianza PRI-Verde obtuviera el triunfo, lo cierto es que -salvo algunos incidentes aislados-, los comicios se realizaron de manera civilizada.
Velasco Coello ponderó la vocación democrática de los chiapanecos, al afirmar que “mi gobierno trabajará con todas y cada una de las autoridades municipales electas, sin distingo de partidos, pues para mi administración es prioridad trabajar de manera conjunta con los nuevos presidentes municipales para impulsar el desarrollo de los distintos ayuntamientos”.
Buena noticia, sin duda, para alcaldes vencedores como Neftalí del Toro, candidato de la coalición PRI-PVEM y Nueva Alianza, quien se erigió como absoluto ganador de la elección para presidente municipal en Tapachula.
Aunque aún están pendientes los resultados definitivos en algunos municipios importantes como Comitán de Domínguez y San Cristóbal de Las Casas, en general el proceso se desarrolló con normalidad, como atestiguaron un total de tres mil 900 observadores electorales.
En cuanto a la alianza para las diputaciones locales, PRI y PVEM fueron juntos en 16 de los 24 distritos electorales, pero en 50 ayuntamientos el Partido Verde aventaja. Además el PRI en solitario -sin alianza-, llevaba la ventaja en 25 presidencias municipales.
Por su parte Nueva Alianza iba con ventaja en Sunuapa, en tanto que Mover a Chiapas se alzaba con la victoria en siete localidades; Chiapas Unido en 11.
En total, según los primeros resultados del Instituto Electoral de Chiapas, acudieron a votar un millón 826 mil 337 ciudadanos con posibilidades de sufragar…
…Este jueves, 23 de julio, los amigos del periodista Marco Aurelio Carballo -autor de innumerables cuentos y novelas-, se darán cita para reconocer los 50 años del trabajo periodístico y literario del talentoso escritor tapachulteco, galardonado en 2 ocasiones con el Premio Nacional de Periodismo y el Premio Chiapas de Literatura Rosario Castellanos.
Rafael Cardona, Alejandro Avilés Favila, Fernando Macías Cué y Patricia Zama, esposa de Carballo, encabezan la convocatoria respectiva del evento que tendrá lugar a partir de las 11:00 horas, en Salón Terraza del Hotel Geneve, ubicado en la calle de Londres 130 Colonia Juárez, de la ciudad de México.
El encuentro servirá asimismo para anunciar la próxima aparición de “Crónicas súbitas”, la más reciente obra del notable narrador -a quien se le ha calificado como el Vargas Llosa chiapaneco-, autor de Polvos ardientes de la Segunda Calle, Crónica de novela, Mujeriego, Vida real del artista inútil, Muñequita de barrio, Diario de un amor intenso, Últimas Noticias y Morir de periodismo…Sus comentarios envíelos a: [email protected]