Alfa omega/Jorge Herrera Valenzuela
PRD y Morena van por el control de la Asamblea Legislativa, pero la oposición va en contra de ambos.
Después de mantener el control político por más de 15 años en el Distrito Federal, el Partido de la Revolución Democrática inició su debacle y tuvo que comprar, por tercera ocasión consecutiva, a diputados de otros partidos para poder formar un grupo de peso en la legislatura local.
Antes, Manuel Granados y Alejandra Barrales tuvieron que comprar diputados del PT y MC para poder alcanzar la mayoría, pero en esta ocasión el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se convirtió en la primera fuerza política y en el informe de gobierno de Miguel Ángel Mancera quedó en claro quién marcará la agenda legislatura de los próximos tres años.
Por lo pronto, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, busca nuevos mecanismos para resolver la crisis por la que pasa su administración y debe de adaptarse a las nuevas circunstancias políticas, pues a partir de su tercer informe de gobierno la oposición será la mayoría en la Asamblea Legislativa y en las jefaturas delegacionales.
Al rendir su informe, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, aseguró que el gobierno de la ciudad de México mantendrá una línea de trabajo activa y propositiva con la ALDF y les propuso trabajar conjuntamente para ser una alternativa y elevar la calidad del debate, sin pasar por alto la tarea de gobernar y legislar, porque “no hay colores cuando de servir se trata”.
Planteó fortalecer los órganos de Contraloría y Fiscalización de recursos; modernizar y aplicar nuevas tecnologías y mecanismos de control como las declaraciones patrimoniales, fiscales y la nueva declaración de conflicto de intereses. Reiteró su compromiso en reabrir el próximo mes de noviembre la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo Metro, y dejó en claro que el GDF mantendrá los cauces legales para castigar a quienes resulten responsables por las fallas de dicha Línea.
Aclaró que se están tomando medidas “para devolver al salario mínimo el justo valor que requiere a favor de quienes más lo necesitan”, y confió que el Senado dela República será sensible para aprobar esta iniciativa. Comentó que su gobierno benefició a unas 35 mil trabajadoras y trabajadores del GDF, con lo que se cumple con dar beneficios a través de un programa de estabilidad laboral.
Por otra parte, con el objeto de acabar con los rezagos en materia administrativa, así como el entramado legal que regula las operaciones en las delegaciones políticas de la ciudad, los diputados locales electos de la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática de la VII Legislatura de la Asamblea Legislativa del Distrito federal anunciaron la creación de una Reforma Administrativa.
En este sentido, el coordinador perredista, Leonel Luna Estrada, informó que se creará una comisión para la reforma administrativa de las delegaciones, en las que participe la Secretaría de Finanzas, la Oficialía Mayor del Gobierno del Distrito Federal, la Contraloría General del Distrito Federal, la Auditoria Superior de la ciudad y las 16 delegacionales, con el objetivo de que sea el espacio en el cual se analice, procese y consensué una propuesta que amplíe las facultades de las demarcaciones.
Lo anterior será para crear los mecanismos para garantizar que en los próximos años el presupuesto real de los órganos políticos administrativos locales no se reduzca e incluso logre incrementar sus recursos, garantizando en todo momento una aplicación más ágil y eficiente.
Pero la nueva Reforma Administrativa no ha sido muy bien acogida por otros partidos e incluso Morena indicó que se intensificarán las auditorías y buscará que se revise la distribución de las facultades, atribuciones y responsabilidades en áreas concurrentes entre el gobierno central y las delegaciones.
Por último, se buscará crear una Subsecretaría de Enlace Delegacional, como área encargada de dar atención puntual a los temas políticos de las delegaciones para establecer un canal de comunicación ágil y permanente con el jefe de Gobierno y que funcionará como ventanilla única para el seguimiento de acceso a programas y fondos federales, así como a temas concurrentes con otros poderes, estados y niveles de gobierno: economía, campo y medio ambiente, protección civil y presupuesto.