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Cae presunto feminicida en la alcaldía Álvaro Obregón en CDMX
CIUDAD DE MÉXICO, 15 de marzo de 2016.- La corrupción y la impunidad, entre otros factores, han provocado indignación y un sentimiento de desconfianza hacia nuestras instituciones, de fractura en nuestro Estado de derecho, advirtió el Ombudsman Nacional, Luis Raúl González Pérez.
El titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) planteó que debemos trabajar arduamente para reconstruir la confianza en las instituciones, porque sin ella se afecta gravemente su legitimidad.
“Una verdadera cultura de derechos humanos tiene como mejor garantía para su protección a instituciones legítimas”, señaló.
Al atestiguar la firma de Convenios de Colaboración entre la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Morelos con los Presidentes Municipales de la entidad, el Presidente de la CNDH reconoció que la ruta de la cultura de respeto a los derechos humanos que ha seguido nuestro país ha sido compleja.
Por ello subrayó que descalificar la actuación de los defensores civiles de derechos humanos, así como a los organismos e instancias nacionales e internacionales, además de que no contribuye a la solución de los problemas, distrae la atención de donde debería estar, que es la necesidad de que la autoridad haga bien su trabajo, y lo haga conforme a derecho y respetando la dignidad de las personas. Ello fortalecerá el innegable derecho de las víctimas del delito al acceso a la justicia.
“Los derechos –añadió— humanos no son ni pueden ser vistos como un recurso o vía para la ilegalidad; por el contrario, este Organismo Nacional y los organismos públicos de derechos humanos se han pronunciado por el cumplimiento y la aplicación de la ley como el marco necesario para una convivencia social pacífica y el respeto a la dignidad de las personas”.
González Pérez puso en relieve que una violación a derechos humanos sólo se verifica cuando hay un acto de autoridad que transgrede los derechos de las personas; si las distintas instancias estatales en el cumplimiento de sus funciones de preservar la seguridad y prevenir el delito sujetan su actuación a lo previsto en la norma, respetando la dignidad de las personas, no podrá existir ninguna acción o pronunciamiento que cuestione su actuación, aseguró.