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AMECAMECA, Edomex., 7 de noviembre de 2014.- El derrumbe que ocurrió en el Pico del Fraile, en la cima del volcán Popocatépetl, no fue a causa de la erupción, sino por erosión natural, estableció el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), aunque en el interior del cráter continúa la actividad volcánica.
El Popocatépetl registró 23 exhalaciones acompañadas por ligeras emisiones de gases y vapor de agua, sin mayores consecuencias.
Únicamente, por las noches se observan pequeños puntos rojos en la montaña, ya que son piedras incandescentes que se ven en la oscuridad.
«El día de ayer se realizó, con apoyo de la Policía Federal, un sobrevuelo de reconocimiento al cráter del volcán. Durante el mismo se pudo observar el domo número 53, con unos 250 m de diámetro y 30 m de grosor, que fue emplazado durante la actividad eruptiva ocurrida la noche del 4 al 5 de noviembre.
“La presencia de este domo puede implicar la ocurrencia de explosiones que lo destruyan, en los próximos días a semanas, como ha ocurrido en ocasiones anteriores, y no implica por el momento un cambio en el nivel de alerta volcánica», estableció el Cenapred.
También se pudo ver la cicatriz y los depósitos dejados por el derrumbe que se registró el jueves en la ladera suroeste del volcán. Este derrumbe obedece a un proceso normal de erosión y no está directamente asociado con la actividad eruptiva del volcán.