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LA PAZ, BCS., 30 de enero de 2015.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) detectó la muerte de 150 ejemplares de tortuga marina muertos, de la especie Chelonia midas agassizii, durante un recorrido efectuado por la Laguna Ojo de Liebre, jurisdicción de Guerrero Negro, en el estado de Baja California Sur.
De acuerdo con un comunicado de la dependencia, se informó que se presume que el deceso de los quelonios marinos fue por hipotermia, ante las bajas temperaturas que se registran en la región por los frentes fríos de la temporada.
Los inspectores de la Profepa realizaron el conteo y levantaron información sobre la condición de los cadáveres a lo largo de 20 kilómetros, en el área conocida como el Remate de la laguna, donde también emprendieron la búsqueda de alguna posible fuente de contaminación o indicios con los cuales se presumiera la causa de muerte.
Las tortugas se encontraron en un avanzado estado de descomposición (hinchadas, reventadas y secas) razón por la cual no fue posible llevar a cabo la toma de muestras para su análisis de laboratorio.
Asimismo, no se les observó algún tipo de laceración o herida en el cuerpo, encontrando a la mayoría de las tortugas enteras y las menos desmembradas por especies carroñeras, como coyotes.
Se presume que tenían varios días de muertas, toda vez que una tortuga marina sin vida tiende a sumergirse por un periodo aproximado de tres a cinco días, hasta que empieza el proceso de descomposición, ya que los gases acumulados provocan la flotabilidad del cuerpo.
Posteriormente, las mareas arrojan los cuerpos ya reventados a las playas y una vez en tierra firme, éstos son afectados por las especies carroñeras y las inclemencias del tiempo, razón por la cual no es posible llevar a cabo la toma de muestra que garantice su debido análisis.
Cabe señalar que con esta contingencia en la Laguna Ojo de Liebre, ya suman 3 los eventos de mortandad de especies marinas en lo que va de este año.
El pasado 13 de enero del 2015 inspectores federales encontraron 14 cadáveres de ballena gris (Eschrictius robustus), mortandad que de acuerdo con especialistas de la Sociedad Mexicana de Mastozoología Marina (SOMEMMA, A.C.) no es un evento extraordinario con respecto a registros de otros años, por lo cual se concluyó que la muerte estaba dentro de un rango normal (natural) para el área.
Otro evento fue registrado el mismo día en la zona de marismas de la Laguna Ojo de Liebre, donde se observaron 16 tortugas marinas de la especie tortuga prieta; la causa de muerte se atribuyó a hipotermia debido a las bajas temperaturas que se han presentado durante los dos últimos meses.
En la zona no se encontró alguna fuente de contaminación, a la cual pudiera atribuirse la mortandad. Sin embargo, se presume que la causa de su muerte es por hipotermia causada por las bajas temperaturas que se suscitaron en el área debido a los frentes fríos presentados en las últimas fechas de los meses de diciembre y enero en la parte norte del estado de Baja California Sur.
Esta hipótesis se basa en que las tortugas marinas son en gran medida ectotérmicas, ya que necesitan el calor de su medio circundante como energía para poder llevar a cabo actividades diarias básicas como moverse de un lugar a otro y digerir sus alimentos.
Un estudio realizado por distintos especialistas sobre las causas de muerte de la tortuga amarilla (Caretta caretta) en la Costa Occidental de Baja California Sur refiere a la mortandad por frío paralizante (cold-stunning), por el cual las tortugas juveniles y subadultas, son susceptibles de morir por la exposición continua y prolongada a bajas temperatura (< de 14 grados Celsius).
Esto se puede presentar comúnmente en el agua durante la madrugada y puede ser causa de muerte sobre todo en especímenes migratorios.
La Profepa ha puesto a disposición de investigadores del Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (CIBNOR) la información recabada en campo a fin de concluir sobre las causas de muerte de las tortugas marinas en Ojo de Liebre.
Finalmente, es de resaltar que en México anidan 07 de las 08 especies de tortugas marinas que existen: la tortuga blanca o verde, prieta, carey, lora, caguama, golfina y laúd; todas se encuentran en la categoría de “peligro de extinción” en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010.