Cae Microsoft a nivel mundial; Outlook, Exchange y Teams presentan fallas
MÉXICO, DF, 30 de octubre de 2014.- A las penas de la muerte, los mexicanos temen enfrentarse a los gastos de velatorios, entierros y otros que ocasiona el fallecimiento de alguien cercano, y que 76 por ciento de la gente considera caros, deja ver una encuesta de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE), que descubrió que sólo para nueve por ciento de la gente morirse resulta barato.
Para cuatro por ciento de los 600 ciudadanos consultados telefónicamente por todo México la muerte no es ni cara ni barata y 10 por ciento no tiene idea y si la tiene no la revela.
Como la muerte tiene su cara económica, los encuestadores de GCE pidieron la opinión de la sociedad sobre qué es más barato, ¿ser cremados o enterrados? Y resulta que las consideraciones están muy parejas, pues 34.6 por ciento considera que quemar un cuerpo es más económico, pero 38 por ciento piensa que ponerlos en una tumba bajo tierra es menos costoso.
Un importante 27 por ciento de la gente no tiene idea de qué cuesta más o menos o prefirió no responder. Una cosa que resalta es que hay 44 mujeres de cada ciento de entrevistadas que tienen idea de que la cremación es más barata, por 33 hombres.
De la muerte nadie escapa, muchas personas tampoco pueden rehuir de los servicios funerarios, campo en el cual GCE pidió a la sociedad que mencionara ¿cuál es la funeraria que presta los mejores servicios en México?:
Las funerarias locales, aseguró 16 por cientode los entrevistados, en tanto que para 11 por cientode los mexicanos lo es Gayosso. Lejos de estas dos menciones, los encuestadores escucharon que uno por ciento de los ciudadanos cree que la mejor es Grupo Funerario Hernández, uno por ciento piensa eso de Jardines del Recuerdo, uno por ciento de Sistema de Velatorios del IMSS y 0.8 por ciento de Funerarias J. García López.
De acuerdo con la encuesta de GCE, una importante mayoría no sabe cuál es la mejor funeraria, al menos eso dijo 65.2 por ciento de la gente, que no respondió o lo hizo con un evasivo “no sé”.
GCE pidió a los mexicanos que echando mano de la memoria y de acuerdo con lo que saben o han escuchado definieran qué servicios funerarios consideran mejores. La elección planteada para cuando llegue el momento de cruzar el umbral de la muerte fue entre los servicios funerarios del IMSS e ISSSTE y los particulares.
A pesar de que los de las instituciones públicas son gratuitos o más baratos, 6 de cada diez mexicanos respondieron que las funerarias privadas son las mejores, en contra de 12 por ciento que piensa que la calidad está en las del IMSS e ISSSTE. Al margen de estas consideraciones, 27 de cada centenar de entrevistados prefirieron no revelar su opinión o de plano pasar del tema al decir que ignora cuáles de las pompas fúnebres son mejores.